El crecimiento económico y social se convirtió en el corazón de la agenda del bloque de economías emergentes conocido como IBSA (India, Brasil y Sudáfrica), mientras que la política va quedando de lado.
Ya pasaron nueve años desde que se creó el foro del IBSA, y ello ha impactado favorablemente en la efectividad de la ayuda en África, destacó Sudarkasa, con 20 años de experiencia en comercio regional e internacional y en análisis de negocios, con atención especial en desarrollo del sector privado.
"El foro de diálogo de IBSA también ha sido catalizador de mayores esfuerzos dentro del Sur para explorar vías por las cuales movilizar ayuda al desarrollo con recursos internos", dijo en entrevista con IPS.
IBSA ha estimulado además iniciativas bilaterales dentro del Sur, como la Asociación Estratégica África-América del Sur y la Nueva Asociación Estratégica Asiática-Africana, destacó.
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IPS: ¿Hay ejemplos específicos del éxito del IBSA?
MICHAEL SUDARKASA: El éxito que han tenido los países del IBSA en trabajar juntos ha indirectamente estimulado una mayor actividad independiente de los tres países, como inversores y como socios en otras partes de África. Y Sudáfrica redobló sus esfuerzos para involucrarse con otros socios en América del Sur y Asia.
IPS: ¿Ha habido sustanciales cambios en el relacionamiento bilateral y trilateral dentro del IBSA?
MS: No hay ninguno que sea muy llamativo. En los inicios del BRICS (Brasil, India, China y Sudáfrica), cuando se sumó Sudáfrica, hubo cierta especulación de que la nueva iniciativa, con China como principal motor, podría eclipsar al IBSA.
Sin embargo, las instituciones del IBSA son bastante fuertes, bien definidas, y todos los miembros del grupo han reiterado su apoyo a la iniciativa y destacado su valor como una estructura autónoma.
Sin embargo, la rivalidad existe entre las dos estructuras, y es probable que siga habiendo esfuerzos para distinguir al IBSA del BRICS, lo que en última instancia podría derivar en cambios más pronunciados y visibles dentro del IBSA.
IPS: ¿Cuáles han sido las mejores prácticas de IBSA hasta ahora?
MS: Entre ellas se destacan el desarrollo de comités técnicos conjuntos involucrando a los ministerios de los tres gobiernos para explorar el intercambio de tecnología y proyectos comunes, y la creación de un fondo para apoyar a los países menos adelantados dentro de las tres regiones.
IPS: ¿Qué impacto ha tenido el foro IBSA en el sustento de los habitantes de sus países miembro?
MS: Económicamente, el IBSA diversificó las oportunidades para las tres naciones, y el comercio bilateral creció. Esto las libró de una segura contracción económica que habrían sufrido si hubieran permanecido concentradas solo en sus históricas asociaciones comerciales con el Norte.
IPS: ¿La crisis mundial comprometió la capacidad del IBSA para lograr objetivos de desarrollo?
MS: Si ha hecho algo, la crisis mundial fortaleció la resolución de los tres países a involucrarse entre sí económicamente, y creó una oportunidad para poner la mira en otras asociaciones económicas Sur-Sur.
IPS: ¿Es IBSA un importante ejemplo de cooperación Sur-Sur que pueda servir de modelo para futuras asociaciones de países en desarrollo?
MS: IBSA sin duda se ha convertido en el paradigma de los beneficios de la cooperación Sur-Sur, y un importante precursor de la voz del Sur en las estructuras multilaterales.
Sin embargo, el hecho de que IBSA sea una iniciativa tripartita, destinada en parte también a servir como puente entre regiones y sus países miembro, dificulta que se pueda replicar en naciones de otras zonas geográficas.
IPS: ¿Cuál es la lección fundamental de la experiencia de IBSA?
MS: IBSA impulsará y seguirá impulsando a las naciones del Sur a que se consideren entre sí como potenciales socios fuertes, y definitivamente ha fijado una tendencia para la asociación Sur-Sur en apoyo al desarrollo.
