Las cuencas hídricas de México se han deteriorado en los últimos años, amenazando la salud ambiental de vastas zonas, alertaron organizaciones no gubernamentales. Un estudio sobre tres cuencas mexicanas elaborado durante cinco años por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF-México) y la Fundación Gonzalo Río Arronte, halló que la cantidad de acuíferos sobreexplotados pasó de 32 a 101 en los últimos 30 años. El total de mantos en México es de 678.
“Hay tres problemas graves: la sobreexplotación, la contaminación y el desperdicio de agua”, dijo a Tierramérica Eugenio Barrios, director del Programa de Manejo Integrado de Cuencas Hidrográficas en WWF-México.
La investigación, presentada el día 20, también concluyó que 73 por ciento de los cuerpos de agua del país están contaminados.
Una de las consecuencias del daño ecológico es la pérdida de especies, especialmente de peces, explicó Barrios.
