En Guatemala sólo hay unos 240 guardarecursos para miles de hectáreas de reservas biológicas declaradas patrimonio natural por el Congreso. «Cuando llegué al Consejo Nacional de Áreas Protegidas, a principios de año, había un guardarecursos por cada 17 mil hectáreas, ahora tenemos uno por cada 10 mil», reveló a Tierrramérica Ana Luisa Noguera, directora de ese organismo.»Lo ideal sería que cada guardarecursos vigilara 500 hectáreas», opinó.
El Parque Nacional Laguna del Tigre, en el norteño departamento de Petén, tiene la mayor cantidad de guardias, con 75 contra los 44 del año pasado, explicó Noguera.
La escasez de personal en las áreas protegidas es aprovechada por «saqueadores de piezas arqueológicas o por narcotraficantes», sostuvo.
El presupuesto de 4,3 millones de dólares asignado este año al Consejo será reducido a 3,6 millones en 2005.
