Habitantes de Choropampa, comunidad campesina de la sierra norte de Perú, demandaron a la trasnacional minera Newmont ante una corte de la central ciudad estadounidense, por el derrame de 115 kilos de mercurio en una carretera el 2 de junio de 2000. Los querellantes consideran que la justicia peruana no les ofrece garantías de imparcialidad.
Newmont, segunda productora mundial de oro, silenció el incidente, descubierto cuando unos 30 escolares enfermaron por jugar con partículas de mercurio que quedaron en la carretera tras una limpieza deficiente.
En 1998, la firma logró una resolución en su favor de la Corte Suprema peruana, con apoyo del entonces jefe de los servicios de inteligencia, Vladimiro Montesinos.
Los demandantes contrataron al estudio de abogados Engstrom Lipscomb Lack, famoso por ganar un juicio por contaminación contra la firma Pacific Gas & Electric Company, condenada a pagar 333 millones de dólares a damnificados (la historia que inspiró el filme «Erin Brockovich»).
