Niñas y niños de unas 10 escuelas de Tegucigalpa recogen basura, la reciclan y la canjean por su propia merienda escolar, además de formar patrullas que educan y fiscalizan que los residuos se depositen donde corresponde. David Blanco, uno de los profesores que impulsa el proyecto en una escuela de la marginal colonia Los Pinos, en el sur de la ciudad, dijo a Tierramérica que la iniciativa es parte de los trabajos de educación ambiental que ejecutan con otros centros escolares y apoyo de la Unidad Ambiental del gobierno local.
La experiencia concitó el interés de otras dos escuelas la sureña ciudad de San Lorenzo, en el departamento de Valle, que intentan impulsar también los patrullajes ambientales en materia de basura y protección del ambiente en una región con grave deforestación.
