Una segunda presidencia de Cristina Fernández en Argentina permitirá consolidar «el proyecto nacional que queremos» y que en el fondo «era el que proponían nuestros hijos», desaparecidos o asesinados por la dictadura entre 1976 y 1983, afirmó la histórica luchadora por los derechos humanos Estela de Carlotto.
Fernández, viuda de Kirchner desde el 27 de octubre de 2010, anunció esta semana que competirá en busca de un nuevo mandato de cuatro años en las elecciones generales del 23 de octubre, para las cuales aparece como favorita para ganar según todas las encuestas, muy alejada de los candidatos de la variada oposición.
La Asociación Civil Abuelas de Plaza de Mayo fue fundada por un grupo surgido de la otra organización humanitaria emblemática, Madres de Plaza de Mayo, para localizar y restituir a sus familias legítimas a todos los niños, alrededor de 500, secuestrados o nacidos durante el cautiverio de sus padres.
Hasta abril pasado habían logrado recuperar a 103 de estos otrora bebés o niñas y niños apropiados o dados en adopción ilegalmente, sin revelar su origen, por la represión dictatorial que hizo desaparecer a unas 30.000 personas, según datos de esas agrupaciones.
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Barnes de Carlotto llegó el jueves a Ginebra para asistir a un acto, en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), de promoción a la candidatura de Abuelas al premio Nobel de la Paz, que se otorga todos los años en Oslo.
En conversación con IPS, expuso su visión de los temas de derechos humanos más palpitantes en Argentina y también de la actualidad política, en el siguiente diálogo.
IPS: ¿Cómo recibieron el anuncio de la candidatura de Fernández a la reelección?
EDC: Para las Abuelas es una gran alegría. Es una muy buena noticia. Nosotras apoyamos mucho las gestiones tanto de Kirchner como de Cristina, no como partido político sino como decisiones de Estado que han tomado en el tema de derechos humanos.
Nunca hubo tanta decisión, apertura y conciencia dentro del Estado para dar solución y respuestas a nuestros reclamos, como la caída (anulación) de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, (dos normas de los años 80 que favorecían la impunidad de los militares).
También decidieron transformar el centro clandestino de tortura y detención de la Escuela de Mecánica de la Armada (en la capital argentina) en un lugar de exposición de la memoria, al igual que otros campos de concentración que existieron en todo el país y que ahora fueron destinados también a espacios de memoria (del genocidio de la dictadura).
Igualmente, las reparaciones, las consultas, el respeto que mostraron (los dos mandatos kirchneristas) y la apertura de la casa de gobierno (Casa Rosada) para todo acto de derechos humanos que se van reparando.
Así que nosotras apreciamos mucho las conductas y creemos plenamente que la continuidad de cuatro años más de Cristina permitirá consolidar el proyecto nacional de país que queremos. En el fondo era lo que nuestros hijos querían, que exista justicia social, que la pobreza se vaya desarraigando y que cada uno viva en dignidad, no en riqueza, pero en dignidad, en Argentina.
IPS: Las organizaciones de derechos humanos de Argentina se vieron conmovidas en las últimas semanas por un episodio que afecta a Madres de Plaza de Mayo, como son las denuncias judiciales sobre presuntas malversaciones atribuidas a Sergio Schoklender, quien fue apoderado de esa entidad, a su hermano Pablo y otros. ¿Que opina del caso?
EDC: En realidad, era una cosa que desde afuera veíamos, a este joven Schoklender, con actitudes realmente extrañas, muy exhibicionista de dinero y de lujos. Además, con una especie de permanente presencia en la institución, como si fuera prácticamente el que movía todo.
Lógicamente esto se destapó porque hubo una disputa entre los dos hermanos Schoklender. Recordemos la historia de ellos. Son chicos que han purgado muchos años de cárcel por haber matado a sus padres (en 1981). Lo cual, bueno, no excluimos de que se reinserten en la sociedad porque han cumplido su condena. Pero en este caso particular parece que han hecho un desfalco, un robo y un uso incorrecto de fondos de la institución Fundación Madres de Plaza de Mayo.
Esto nos duele a todos y nos roza a todos. Nosotros hemos salido a declarar la diferencia que hay entre las organizaciones. Las Abuelas somos un organismo totalmente distinto, con actitudes y manejo de dinero mínimo, pero con claridad en todas las acciones y con el uso del dinero que nos llega de donaciones.
Tenemos auditorías permanentes que nos felicitan por el control y la prolijidad. Yo como dirigente sé, tengo la obligación de enterarme, si las cosas andan bien. Pero en este caso, no sé que ha pasado con la señora (Hebe) de Bonafini (presidenta de Madres), ella no sabía que estas personas eran de esta calaña. Ahora el amor se transforma en odio y ella también desea que sean castigados con todo el peso de la ley.
¿Qué queremos nosotros, todos los organismos de derechos humanos? Que la justicia actúe, que se sepa lo que pasó y que se castigue, si hay delito, a quien corresponda.
IPS: Otro caso importante es la investigación sobre la identidad de la joven y el joven adoptados, a muy corta edad y en el apogeo de la dictadura, por Ernestina Herrera de Noble, principal accionista del grupo de medios de comunicación encabezado por el diario Clarín. ¿Qué opina del anuncio de que ambos comparecerán en las próximas horas a someterse al examen genético para determinar su filiación, tras 10 años de negarse apelando a recursos judiciales?
EDC: Para las Abuelas de Plaza de Mayo fue una muy buena noticia enterarnos que los abogados, que dicen defender a estos jóvenes, habían presentado un escrito donde ellos, los chicos, aceptaban sacarse sangre, o saliva o cabello, lo que fuere, en el Banco Nacional de Datos Genéticos, para que se compare con todas las familias que estamos esperando encontrar a nuestros nietos a través de esa herramienta científica.
Eso era novedoso porque hace 10 años que se niegan sistemáticamente, a través de sus abogados, a hacerse este tipo de cotejo, con condicionamientos ilícitos y declinaciones de jueces que realmente interrumpieron y prorrogaron en el tiempo esta angustia de saber si son o no los nietos buscados.
No sabemos si serán o no (hijos de desaparecidos), pero ya llegar a este punto es llegar a la verdad. Para nosotros eso es lo más importante.
El caso Noble, para nosotros es uno más. No es porque ella sea dueña del emporio Clarín que nosotros "le queremos sacar", entre comillas, a sus hijos. No, es que los adoptó con serias irregularidades, con los dos expedientes de adopción viciados de defectos y de mentiras. Y la negativa también implicaba un desafío a encontrar la verdad.
Bueno, si se toman las muestras, con la debida protección y asistencia de los peritos por ambas partes, y los abogados y todo lo que corresponde por ley, se llegará a saber si son los nietos que nosotros pensamos.
Si no lo son, ellos seguirán su vida, esperando saber. Ya con la sangre procesada en el Banco, queda para que en un futuro, si hay un reclamo de alguna tardía búsqueda de un niño robado, entonces ellos podrán encontrar quizás su verdad. Ojalá sean nuestros nietos, porque todo lo que van a recibir va a ser libertad, amor y familia.
IPS: ¿Por qué acepta esta iniciativa de la organización Abuelas por la Paz que promueve la campaña para que este año se les otorgue el premio Nobel de la Paz?
EDC: Bueno, esto ya hace muchos años que se propuso en Argentina. El senador nacional Daniel Filmus, quien fue ministro de Educación de Kirchner, fue quien mandó nuestros "méritos", entre comillas, al comité del premio Nobel, y fuimos aceptadas y entramos en el juego de los postulados.
Sabemos que el año pasado estábamos muy bien posicionadas, pero se lo dieron a (Barack) Obama (presidente de Estados Unidos).
Bueno, Obama tendría que haberse negado por lo que iba a hacer al día siguiente (aumentar las tropas en Iraq). Pero así son las cosas.
Este año vuelven a postularnos y nos invitan para venir a charlar, para que la gente nos conozca, porque no se puede propiciar o nominar lo que no se conoce. Entonces, este nacimiento del grupo Abuelas por la Paz, que es una organización no gubernamental, es la que nos convoca a dar una charla, que es lo que hacemos cotidianamente, no por los premios sino para que la lucha continúe.
