Doce mil trabajadores en las plantaciones de banano de Costa de Marfil afrontan incertidumbre con la implementación de un nuevo acuerdo sobre aranceles implementado por la Unión Europea (UE).
Las tarifas caerán de los 176 euros actuales por tonelada (256 dólares) a 114 euros (166 dólares) para 2017.
Esto convertirá al banano latinoamericano producido y exportado por poderosas multinacionales como Dole y Chiquitamás competitivo que el cultivado en África, el Caribe y el Pacífico.
El presidente de la asociación de productores de Costa de Marfil, Mathias N'Goan Aka, prevé que las exportaciones, actualmente en 230.000 toneladas al año, caerán 14 por ciento debido a esto.
Pero en las grandes plantaciones en torno Azaguié, en el sur de Costa de Marfil, los trabajadores no se quedan con los brazos cruzados.
Doulaye Savadogo, dueño de una plantación de una hectárea, sostuvo que ante esta situación debían optar por los mercados internos y subregionales. "En Burkina Faso, de donde vengo, el banano es un producto muy popular. Incluso se ha convertido en un alimento básico", señaló.
La producción de banano es un asunto de "mucho dinero", dijo Savadogo a IPS. "Es por eso que no hay muchos de nosotros. Incluso aquí te das cuenta que son los occidentales los que tienen las mayores plantaciones. Para cultivar banano en una héctarea se necesitan 15 millones de francos CFA (33.300 dólares)", explicó.
En el mercado de Gouro Adjamé, en Abdiyán, la capital comercial marfileña, mujeres descargan 10 toneladas de banano de un camión.
Isabelle Lou Kouhelou, una de las vendedoras, dijo a IPS que el consumo de este producto es alto en Abdiyán.
Dijo creer que Costa de Marfil podría vender su producción a los países de África occidental, aunque tiene dudas sobre si el fruto podría permanecer fresco.
Con su limitada experiencia de vendedora en Burkina Faso, Malí, Senegal y Níger, Lou Kouhelou, cree que el banano marfileño podría comercializarse mejor que el que ya se puede conseguir allí.
Sin embargo, se lamenta de las dificultades del transporte por carretera y tren en la región. Sostuvo que es necesaria la intervención del gobierno para una iniciativa destinada a conquistar los mercados regionales.
Analistas están preocupados por el excedente de banano en el mercado mundial, y temen que la competencia pueda afectar duramente a los productores africanos, menos organizados que sus pares en América Latina.
Guy Alain Gauze, representante marfileño de la OMC en un simposio sobre el sector, realizado en octubre pasado en Grand Bassam, propuso la creación de un centro especial para investigar la evolución del mercado europeo.
El centro de investigación, según Gauze, debería eventualmente diseñar las acciones necesarias para proteger las exportaciones de los países de África, el Caribe y el Pacífico.
"Necesitamos una sólida política para reestructurar la industria del fruto, que depende de la fortaleza de la capacidad productiva y de la calidad mejorada, en línea con los estándares y regulaciones del mercado internacional", señaló.
También se necesita "una investigación agrícola más amplia y la promoción del consumo interno, subregional y regional", dijo entonces Guaze.
También sugirió "la diversificación de los mercados de exportación, con especial atención en los africanos, en especial aquellos de África del Norte no ricos en petróleo", añadió.
