La cría de quelonios, incluso para exportación de su carne, crece en el noroccidental estado brasileño de Amazonas, que ya tiene 69 empresarios dedicados a la actividad con autorización del Instituto Brasileño de Medio Ambiente (Ibama), la autoridad ambiental. Un plan de acción definido por el Ibama, mediante centros de investigación y fomento, busca implantar la cadena de producción de esta nueva ganadería, con áreas de reproducción, mataderos e industrias de procesamiento.
Los criaderos para abastecer restaurantes, reduciendo la caza depredadora, son estimulados por el Ibama desde hace doce años, con la donación de quelonios recién nacidos.
Es una actividad prometedora, pero aún con muchas insuficiencias.
Los criaderos sólo engordan a los animales, no los reproducen y están lejos de cubrir la demanda, lo que fomenta la extracción no sustentable e ilegal, comentó a Tierramérica el investigador de quelonios amazónicos Juarez Pezzuti, profesor de la Universidad Federal de Pará.
