Un grupo de arqueólogos guatemaltecos descubrió de forma casual un monumento maya que data del año 677 después de Cristo, en el norteño departamento de Petén. La obra contiene 140 jeroglíficos sobre la vida en esa época, dijo a Tierramérica el ministro de Cultura, Manuel Salazar.
El contenido de los textos «es bien interesante, porque nos habla sobre la vida de un gobernante y sobre la alianza entre dos pueblos», explicó a Tierramérica el arqueólogo Edgar Escobedo.
El descubrimiento se produjo durante una expedición que buscaba confirmar denuncias de robos en el centro arqueológico Perú, en Petén, 600 kilómetros al norte de la capital, dijo Escobedo, director del Proyecto Perú.
