EEUU: Jefe de Hamas listo para partir, pero permanece detenido

El líder del movimiento Hamas Musa Abu Marzook, detenido en Estados Unidos desde hace casi dos años, espera dejar la cárcel, pero todo indica que permanecerá en prisión mientras la justicia decide si lo deportará.

Marzook, quien admitió liderar el ala política del movimiento de resistencia islámico Hamas, logró una victoria clave la semana pasada, cuando el gobierno de Israel, que lo acusa de terrorismo, revirtió su anterior solicitud de que fuera juzgado en Israel.

La renuncia de Israel significó que Marzook ya no permanecerá detenido mientras lucha contra la extradición a ese país.

No obstante, aunque este lunes pidió al juez de la Corte de Distrito Denise Cote la liberación inmediata, todo indica que será detenido por el servicio de inmigración mientras el gobierno decide si lo deportará, y cuándo. Marzook es residente legal en Estados Unidos desde hace 15 años.

Esto significa, según plantea su abogado Michael Kennedy, que un hombre "que ni siquiera es sospechoso de violar las leyes y regulaciones de Estados Unidos" continúa detenido 20 meses después de haber sido detenido en Nueva York tras un viaje a Medio Oriente.

En una de las ironías clave en el caso de Marzook, el líder de Hamas, quien sólo admite haber juntado fondos para actividades pacíficas de Hamas, pidió ahora su propia expulsión de Estados Unidos, para alcanzar su liberación.

Pero para lograr ese objetivo tendría que admitir que ha sido terrorista. "Si se niega a declarar que es terrorista, el gobierno de Estados Unidos asumirá felizmente la carga de intentar probar que lo es", dijo Kennedy.

Kennedy y un creciente número de líders árabe-americanos temen que los procedimientos de inmigración oculten el deseo de Israel y Estados Unidos de mantener al líder de Hamas en prisión durante una frágil fase del proceso de paz en Medio Oriente.

Esta es la razón por la cual Israel demandó en primer lugar la extradición de Marzook para ser juzgado en ese país, aunque el gobierno nunca tuvo evidencias suficientes para llevarlo a juicio, afirma Kennedy.

Cuando Marzook dejó en evidencia a Israel y Estados Unidos en enero, al poner fin a sus intentos legales de luchar contra la extradición, alega Kennedey, Israel abandonó inmediatamente su propio intento de ganar la extradición.

Puede concluirse "que Israel nunca quiso que el doctor Abu Marzook fuera llevado a Israel, que la extradición era un argumento clave y cínico para detener y aislar a un efectivo opsitor político, y que el gobierno de Estados Unidos permitió que sus procesos y leyes fueran pasados por alto ante la agenda política de otro país", alega el abogado.

Israel afirma que siempre tuvo en su poder fuertes evidencias contra Marzook, pero no estaba dispuesto a enfrentar los riesgos, incluyendo la posibilidad de la represalia de Hamas, en el caso de que el líder fuera juzgado en ese país.

El ministro de Defensa de Israel, Yitzhak Mordechai, dijo al anunciar el fin de la demanda de extradición, la semana pasada en Washington, que Marzook "merece pasar muchos años en la cárcel, hasta el fin de su vida".

Por otra parte, añadió el ministro, "somos conscientes de los peligros y el significado del proyecto llamado Abu Marzook".

El gobierno conservador del primer ministro Benjamin Netnayahu ya enfrenta una creciente crisis por la expansión de asentamientos en Cisjordania palestina.

Lo último que el primer ministro israelí quiere es una nueva confrontación con Hamas, tras visitar Estados Unidos este lunes para negociar con el presidente Bill Clinton sobre el proceso de paz. La reunión no tuvo resultados concretos.

Netanyahu pretende sustituir los acuerdos de paz de Oslo, de 1993, por nuevos tratados.

Horas después de la reunión, este martes tres palestinos murieron en violentos enfrentamientos con la policía de Israel en Hebrón, en Cisjordania, según anunció la radio ofical israelí, y más de 80 palestinos y cinco israelíes resultaron heridos.

Ahora la cuestión es adónde irá el líder de Hamas, aunque Washington garantice su exclusión rápidamente.

Bajo la ley de inmigración de Estados Unidos, sería enviado a su lugar de origen, la ciudad de Gaza, la cual ahora es parte de la semiautónoma Autoridad Nacional Palestina, o a su punto de partida antes de reingresar a Estados Unidos en julio de 1995, Emiratos Arabes Unidos.

Marzook cree que será enviado a Jordania, donde a menudo hizo trabajo para Hamas. Autoridades jordanas admitieron la semana pasada que considerarían asistir cualquier pedido de Estados Unidos para que el líder fuera enviado a Jordania.

Significativamente, una de las paradas esta semana en Estados Unidos de Netanyahu fue el hospital del estado de Minnesota en que el rey Hussein de Jordania, uno de los mediadores más destacados del proceso de paz, recibe tratamiento médico.

Pero Jordania podría estar aún muy lejos, en particular si Marzook enfrenta la afirmación de Estados Unidos según la cual es un terrorista y esto retrasa su expulsión. (FIN/IPS/tra-en/fah/yjc/lp/97

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe