Un ingeniero de Cabo Verde que trabaja en la Escuela Politécnica de la Universidad de São Paulo, Brasil, desarrolló un equipo para potabilizar agua salada más barato que otros métodos ya conocidos y con menores daños al ambiente. El invento, denominado “columna de desalinización”, emplea energía eólica generada por catavientos o turbinas. Se bombea el agua salada arriba en la columna. Su peso impulsa un émbolo que presiona el aire en la cámara inferior del sistema. Ese aire ejerce una fuerza sobre otro compartimiento, empujando el agua a través de una membrana que opera como filtro y la hace potable.
Juvenal Rocha Dias se inspiró en la escasez de agua potable de su país. “Quería crear alternativas para la desalinización en países menos desarrollados. El sistema convencional usa energía de combustible fósil, que lo hace caro y contaminante”, dijo a Tierramérica.
