GRIPE: Ahora es pandemia… y sigue amenazado el Sur

El tono precavido de la directora general de la OMS, Margaret Chan, al anunciar que la gripe A/H1N1 ya se extendió por el mundo y por tanto es una pandemia, sólo se alteró para expresar inquietud por los efectos potenciales del virus en los países en desarrollo, en particular en las jóvenes embarazadas.

Quizá lo más preocupante sea que no sabemos cómo se va a comportar este virus en las condiciones que suelen imperar en el mundo en desarrollo, pues hasta la fecha la gran mayoría de los casos se han detectado e investigado en países relativamente ricos, dijo la jefa de la OMS (Organización Mundial de la Salud).

Uno de los fundamentos de la decisión adoptada este jueves por la OMS, de elevar el nivel de alerta de la pandemia a la fase seis, el último peldaño de la escala de prevención, ha sido la certidumbre de que la epidemia se ha expandido por países de distintas regiones.

El prefijo "pan", del griego, que significa "todo o todos", atribuye el sentido extensión a lo que hasta ahora era sólo una epidemia.

El virus se está volviendo estable en algunos países, corroboró Keiji Fukuda, subdirector general de la OMS. El virus está para quedarse, insistieron los expertos de esa institución.
[related_articles]
Sin embargo, tanto Chan como Fukuda evitaron identificar a los países donde la infección de la también llamada gripe porcina se ha producido en comunidades de población, uno de los requisitos que provocan el salto de la fase cinco a la seis de esa escala.

De todos modos no pudieron ocultar que en los tres países de América del Norte, Canadá, Estados Unidos y México, se observa claramente la existencia de transmisión dentro de una comunidad.

En Australia, otro país gravemente golpeado por el virus, los casos de contagio comunitario se verifican en áreas localizadas y no se extienden a todo el territorio.

Los otros ejemplos de ese tipo de transmisión ocurren en países de Europa y de América del Sur, que los expertos tampoco quisieron precisar.

La reacción de los países ante la voz de alerta máxima propalada por la OMS dependerá de las realidades de cada uno, dijeron los expertos. Aunque llamó la atención la insistencia con que Chan se refirió a la posibilidad de una segunda oleada de infecciones en aquellos países ya alcanzados por la epidemia.

Todos los países deben tener en cuenta que un día les llegará el flagelo o que aumentará el número de casos que ya han registrado. Y en aquellos donde los brotes parecen haber tocado un techo, deberán igualmente prepararse para la segunda embestida, aconsejaron.

La OMS ha enviado orientaciones sobre medidas de protección y precaución a todos sus 193 estados miembros. Los países libres hasta ahora del contagio con aquellos con un número muy reducido, también deberían mantenerse vigilantes, aconsejó Chan.

Como viene haciendo desde que esta epidemia de influenza A/H1N1 apareciera en América del Norte, a fines de abril, la OMS reafirmó su oposición a que los países establezcan restricciones a los viajeros, al cierre de fronteras y al establecimiento de obstáculos comerciales relacionados con este caso sanitario.

Chan evitó comentar acerca de los efectos de la alerta sanitaria en los mercados económicos y financieros.

Un diplomático caribeño, que pidió reserva de su identidad, reconoció a IPS que su gobierno seguía con intranquilidad las políticas de la OMS porque una restricción al movimiento de personas podría afectar severamente a la industria turística, vital para su país.

De la misma manera eludió pronunciarse sobre una eventual declaración de libertad de patentes farmacéuticas para producir medicamentos destinados a la gripe, "porque no soy una especialista en propiedad intelectual", dijo. Sin embargo, Chan admitió que mantiene contacto estrecho con los fabricantes de vacunas contra la gripe que, en cuestión de pocas semanas, concluirán la producción destinada a la gripe estacional para el hemisferio norte.

A partir de entonces dispondrán de toda su capacidad para asegurar el mayor suministro de vacuna antipandémica. De todos modos, la vacuna contra el virus A/H1N1 no estará disponible en el mercado hasta septiembre, aclaró.

Chan ratificó que la OMS ha enviado partidas de medicamentos antigripales, apropiados para afrontar a la gripe porcina, a 131 países en desarrollo, la región que es motivo de la preocupación de la agencia sanitaria.

Una de las razones de esa inquietud es que más de 99 por ciento de la mortalidad materna, un indicador de la mala calidad de la atención durante el embarazo y el parto, se registra en el mundo en desarrollo, dijo la directora de la OMS.

Otro factor de cuidado es que alrededor de 85 por ciento de la carga de enfermedades crónicas se concentra en los países de ingresos bajos y medianos. En los países relativamente ricos, el panorama puede empeorar cuando el virus alcance a zonas donde los recursos son más limitados, la atención de salud es mala y se registra una elevada prevalencia de otros problemas médicos.

Uno de los argumentos esgrimidos por la OMS para defender la elevación del grado alerta al nivel de pandemia es la imprevisibilidad del virus. "Es el virus quien dicta las reglas, y éste, como todos los de la gripe, puede cambiarlas en cualquier momento, sin ton ni son", dijo Chan.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe