Cuba y Venezuela esperan que sus estrategias de integración salgan fortalecidas con el ejemplo de Petrocaribe, un pacto de cooperación energética regional que ampara a países de menor desarrollo y cuyas economías sufren con fuerza el impacto de los altos precios del crudo.
El análisis de los esfuerzos conjuntos para "consolidar Petrocaribe como espacio de cooperación ejemplar" en la región es uno de los principales objetivos de la reunión de jefes de Estado y de gobierno de las naciones integrantes de ese convenio, prevista para este viernes en Cuba.
"La cita permitirá mostrar las ventajas de una integración de este tipo en contraste con la que ofrecen los tratados propuestos por Estados Unidos, aunque eso no significa que los caribeños abandonen su relación con ese país y Europa", comentó a IPS un analista cubano que optó por no ser identificado. Petrocaribe nació en 2005 por iniciativa del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y actualmente está conformada, además de ese país, por Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, República Dominicana, San Cristóbal y Névis, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Suriname y Nicaragua.
La mayoría de esas naciones estarán representadas por sus gobernantes en el encuentro de un día previsto en la ciudad de Cienfuegos, a 232 kilómetros de La Habana, cuyas sesiones terminarán con la inauguración de una antigua refinería modernizada con capital venezolano.
Esa usina procesará en la primera etapa 65.000 barriles diarios de crudo, lo cual duplica la capacidad actual de refinación que tiene Cuba, y beneficiará no sólo a este país sino a los demás estados miembros de Petrocaribe. En una fase posterior de expansión, esa producción sobrepasará los 100.000 barriles por día.
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Fuentes oficiales confirmaron que la delegación cubana estará encabezada por el presidente en funciones, Raúl Castro, lo cual evidencia la prioridad que conceden los anfitriones tanto al tema energético como a sus relaciones actuales con los demás países del Caribe, su entorno natural por geografía, historia y cultura.
Además de Chávez, asistirán los presidentes Daniel Ortega, de Nicaragua, René Préval, de Haití, y Leonel Fernández, de República Dominicana, así como los primeros ministros Bruce Golding, de Jamaica, Baldwin Spencer, de Antigua y Barbuda, y Ralph Gonsalves, de San Vicente y las Granadinas, entre otros.
Como invitados participarán Barbados y Trinidad y Tobago que han estado presentes en citas anteriores de Petrocaribe y, delegaciones de Guatemala y Honduras, quienes inauguran su presencia en instancias de este convenio, el cual vienen observando con interés.
Asimismo, está confirmada la asistencia de representantes de la Comunidad del Caribe (Caricom), de la Asociación de Estados del Caribe (AEC) y de la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO). Petrocaribe es un Acuerdo de Cooperación Energética que, según sus postulados, intenta resolver las asimetrías en el acceso a los recursos energéticos, por la vía de un nuevo esquema de intercambio favorable, equitativo y justo entre los países de la región caribeña.
Según medios oficiales venezolanos, el pacto constituye, más que un contrato de suministro de hidrocarburos para los países del Caribe, una iniciativa política destinada a brindar facilidades tanto financieras como estructurales que garanticen el suministro directo y sin intermediarios hacia los países del área.
El convenio financia 40 por ciento de la factura petrolera, tomando como referencia el precio de los hidrocarburos. Igualmente extiende el período de gracia para el financiamiento de uno a dos años y prevé una extensión del período de pago de 17 a 25 años, reduciendo el interés a uno por ciento, si el precio del petróleo superaba los 40 dólares por barril, un valor largamente superado.
El pago a corto plazo de 60 por ciento de la factura se extiende de 30 a 90 días. Además, Venezuela está dispuesta a aceptar que parte del pago diferenciado de la factura se realice con bienes y servicios, por los que puede ofrecer, en algunos casos, precios especiales.
Ese esquema de financiamiento contrarresta el impacto de los precios especulativos del petróleo que ya superan los 90 dólares el barril. El costo del servicio eléctrico para la población de San Cristóbal y Névis, por ejemplo, tendrá una reducción de cinco por ciento en 2008 gracias al abastecimiento de combustible dentro de Petrocaribe.
La tercera cumbre, efectuada en agosto en Venezuela, transformó los acuerdos de suministro de crudo y derivados en un gran pacto de seguridad energética entre los países miembro de Petrocaribe. En esa instancia, Chávez consideró que la energía "va a convertirse en el eje articulador de la unión que soñaron nuestros libertadores".
Además, el gobernante venezolano propuso varias líneas de trabajo para acompañar los convenios de suministro, entre los cuales mencionó "una red de refinerías" en el Caribe para procesar el crudo pesado que Venezuela extraerá de su sudoriental Faja del Orinoco, un gasoducto transcaribeño y plantas de regasificación.
Otra de sus propuestas apuntaría al desarrollo de la industria petroquímica, además de energías alternativas como la solar, eólica y los combustibles producidos a partir de vegetales, aunque en este ultimo caso aclaró que solamente sería para producir el etanol necesario para agregar a las gasolinas, 20 por ciento, a fin de hacerlas "menos contaminantes".
