Cuba amplía alianzas externas en tiempos de crisis económica

El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, estrecha la mano de su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, durante su novena visita a Cuba, el 19 de febrero. El jefe de la diplomacia rusa, cuya anterior estancia en la isla fue en abril de 2023, enfatizó que Cuba es un importante aliado de Moscú en América Latina y el Caribe. Imagen: Pool

LA HABANA –  Con protagonismo de una activa política exterior, Cuba busca respaldos externos para encarrilar su maltrecha economía. A ello apunta el restablecimiento de relaciones con Corea del Sur, el reacercamiento con Brasil y la más reciente visita a La Habana de Serguei Lavrov, ministro de Relaciones Exteriores de Rusia.

De acuerdo con el politólogo Carlos Alzugaray “no hay una relación directa entre los evidentes resultados positivos de la actividad cubana de política exterior y la mejora de la crítica situación económica, social y política del país”.

Pero “la diplomacia cubana viene demostrando que sigue teniendo una excelente capacidad para diseñar y ejecutar acciones que pueden beneficiar económicamente al país”, contrastó en diálogo con IPS el antiguo diplomático, profesor y analista cubano.

A juicio de Alzugaray, el fomento de los vínculos externos “al menos neutraliza los intentos de Estados Unidos por aislar a Cuba, un componente de su hostil política hacia la isla”.

Además del embargo que aplica desde 1962, Washington mantiene a Cuba desde enero de 2021 en la lista de países a los cuales considera patrocinadores del terrorismo.

Según la parte cubana, ello enmaraña aún más el acceso a fuentes de financiamiento e inversiones extranjeras, ante el temor de bancos de terceros países a recibir elevadas multas por aceptar pagos, depósitos o cuentas de empresas cubanas en dólares.

“La diplomacia cubana viene demostrando que sigue teniendo una excelente capacidad para diseñar y ejecutar acciones que pueden beneficiar económicamente al país”: Carlos Alzugaray.

La falta de capitales es un problema fundamental de la economía insular, a lo cual se suma la suspensión de los pagos de la deuda con los países acreedores del Club de París desde 2020, como consecuencia de los efectos de la pandemia, una presión adicional a los planes de desarrollo.

Vista de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, ubicada en la provincia de Artemisa y a 45 kilómetros al oeste de La Habana. Brasil tuvo un rol decisivo en la concreción desde 2013 de este enclave estratégico, un centro neurálgico para atraer capital extranjero. Imagen: Jorge Luis Baños / IPS

Rusia

Durante una breve visita el 19 de febrero, Serguei Lavrov dialogó con su homólogo Bruno Rodríguez y fue recibido por el presidente Miguel Díaz-Canel.

Se trató de la novena estancia en la isla del jefe de la diplomacia rusa en casi dos décadas; segunda en menos de un año, luego de visitar La Habana en abril de 2023.

Lavrov afirmó a los medios de comunicación que Moscú apoyará las aspiraciones de Cuba de ampliar sus nexos con la Unión Económica Euroasiática y el grupo de los Brics, entidades donde Rusia comparte membresía con otras naciones, algunas de ellas consideradas grandes economías emergentes.

Mencionó la concreción este año de dos créditos especiales para suministrar petróleo y sus derivados.

Junto con Venezuela y México, Rusia figura entre los principales suministradores de carburantes a este país insular caribeño de 11 millones de habitantes.

Muy dependiente de combustibles fósiles para generar electricidad, Cuba confronta déficits de generación debido a roturas o mantenimientos en sus añejas termoeléctricas, en su mayoría con componentes del extinto campo socialista.

A ello se suma el déficit de fueloil y diésel que alimentan la red de apoyo compuesta por grupos electrógeneos y plantas flotantes (patanas) alquiladas a Turquía.

Hasta la desintegración de la Unión Soviética, en 1991, ambos países mantuvieron una estrecha alianza política y económica.

En la actualidad, Rusia es el quinto socio comercial de Cuba y en 2022 el intercambio comercial fue de 452 millones de dólares, mientras se estima un aumento en 2023.

Lavrov se refirió a las perspectivas en el turismo, después que el año pasado se registró un record de casi 185 000 visitantes rusos, facilitado por más de una decena de vuelos semanales desde la nación eslava hasta destinos cubanos.

Al igual que con otras tarjetas internacionales como Visa y Mastercard, desde 2023 el sistema bancario en la isla acepta las tarjetas del sistema de pago ruso MIR, lo cual permite a ciudadanos de ese país realizar extracciones convirtiendo rublos en pesos cubanos, o comprar mercancía en las tiendas en divisa, algo que añade incentivos para turistas y empresarios de aquella nación.

Aunque consideradas “estratégicas”, las fortalecidas relaciones con Rusia distan de ser las sostenidas durante tres décadas con la extinta Unión Soviética.

Se aprecia un impulso de los nexos tras el diálogo en Moscú en noviembre de 2022 entre el presidente Díaz-Canel y su homólogo Vladimir Putin.

Cuba ha insistido en la búsqueda de una solución “pacífica, negociada y duradera” a la guerra con Ucrania, si bien rechaza las sanciones de varias naciones contra Rusia y defendido su derecho a la defensa ante la expansión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan) hacia sus fronteras.

Durante 2023 varias delegaciones de funcionarios y empresarios rusos llegaron al país caribeño para explorar áreas de interés y firmar acuerdos, al tiempo que se identificaron potencialidades para nuevos proyectos en sectores como la energía, transporte, minería, siderurgia, suministro de alimentos, agricultura y la industria azucarera, urgidos de inversiones millonarias.

Estands de las empresas biotecnológicas y farmacéuticas cubanas Labiofam y BioCubaFarma durante la edición 39 de la Feria Internacional de La Habana 2023. El gobierno de Corea del Sur valora la posibilidad de cooperación e investigación en la medicina y biotecnología, áreas donde Cuba sobresale con medicamentos, insumos y tratamientos reconocidos en el orbe. Imagen: Jorge Luis Baños / IPS

Corea del Sur

El restablecimiento de relaciones diplomáticas entre Seúl y La Habana, anunciado el día 14, marca un “giro importante” en los esfuerzos de Corea del Sur por fortalecer su diplomacia en la región latinoamericana, apuntó una nota del Ministerio de Asuntos Exteriores surcoreano.

Tal acercamiento diplomático venía gestándose desde hace casi una década, cuando en 2016, La Habana y Seúl firmaron un memorando de entendimiento para compartir información relativa a los negocios, realizar intercambios entre sus delegaciones y organizar foros.

Las relaciones estaban interrumpidas desde el triunfo de la revolución cubana de 1959. Un año después Cuba estableció relaciones con la República Popular Democrática de Corea, conocida como Corea del Norte, con cuyo gobierno mantiene una estrecha relación algo que, según analistas, dilató la decisión de restaurar los nexos diplomáticos con Seul,  pese a los intercambios comerciales y culturales ya existentes.

Las significativas reservas de níquel y cobalto de Cuba resultan de gran interés para el país asiático, uno de los líderes en la fabricación de baterías para vehículos eléctricos.

Al respecto, la oficina presidencial surcoreana subrayó que Cuba es “un mercado sin explotar”, y aunque reconoció que “el comercio directo aún es muy limitado debido a las sanciones de Estados Unidos”, valoró la oportunidad del establecimiento de relaciones diplomáticas “para sentar las bases para una expansión gradual de la cooperación económica”.

El propio entidad aseveró que apoyará a las empresas de aquel país que deseen entrar en el mercado cubano para el suministro de artículos de primera necesidad, electrodomésticos y maquinaria.

Seúl ponderó asimismo la posibilidad de cooperación e investigación en la medicina y biotecnología, áreas donde Cuba sobresale con medicamentos, insumos y tratamientos reconocidos en el orbe.

“En fecha reciente se ha visto un incremento de los intercambios diplomáticos con estados clave del Medio Oriente como Irán, Emiratos Árabes Unidos, Qatar, y Arabia Saudita”, recordó Alzugaray.

A su juicio, “no importa que algunos sean aliados importantes de Estados Unidos, muchos de estos estados han acogido abiertamente la relación con Cuba y ofrecido asistencia financiera, económica y tecnológica”.

A cambio, argumentó el analista, “la isla ofrece apoyo diplomático y asistencia en materia de seguridad social. Todo ello puede resultar útil. El único inconveniente es que el estado de la economía cubana impide aún mejores resultados”.

Brasil

Otro de los países que puede contribuir a oxigenar la economía cubana es Brasil, cuyo presidente, el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva (2023-2026) dispuso revertir el distanciamiento durante la gestión de su predecesor, el ultraderechista Jair Bolsonaro (2019-2022).

La nación sudamericana tuvo un rol decisivo en la concreción desde 2013 de la Zona Especial de Desarrollo de Mariel, a 45 kilómetros al oeste de La Habana.

Con un carácter estratégico, este hub o centro logístico regional para la producción y redistribución de mercancías, y centro neurálgico para atraer capital extranjero, acoge más de 60 empresas y se ubica en el tránsito de rutas comerciales marítimas que conectan a América del Norte con el Canal de Panamá.

Durante la reunión del Comité Gestor Binacional Brasil-Cuba, del 5 al 7 de febrero, se firmaron varios acuerdos como el que facilitará la colaboración entre los centro de Ingeniería Genética y Biotecnología, y de Inmunoensayo, en La Habana, con la empresa brasileña Bahiafarma, para el desarrollo del medicamento cubano del Heberprot-P contra las úlceras del pie diabético y otras terapias.

Ambas partes propusieron revitalizar la cooperación en la salud, innovación, la industria biotecnológica y farmacéutica, y la regulación de medicamentos, equipos y dispositivos médicos.


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Carlos Gadelha, viceministro de Salud y jefe de la delegación brasileña, destacó que, gracias a las transferencias tecnológicas de Cuba, instituciones de su país han podido desarrollar vacunas y la síntesis de varios productos, al ser recibido el día 7 por el presidente Díaz-Canel.

En agosto de 2023, al visitar La Habana y entrevistarse con autoridades cubanas, el excanciller y asesor especial de la Presidencia de Brasil, Celso Amorím, confirmó el deseo de Lula «de reaproximar a Brasil con Cuba… de volver a mejorar, si es posible, la relación que era muy cercana y que seguirá siendo así”.

Como expresión de este reacercamiento Cuba dedica a Brasil, por segunda ocasión desde 2005, la edición 32 de la Feria Internacional del Libro de La Habana, del 15 al 25 de febrero, con una amplia delegación cultural y unos 6000 libros en español sobre literatura, ciencias sociales y políticas del país sudamericano, los cuales serán donados a instituciones académicas y de enseñanza en la isla.

ED: EG

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