La decisión de Estados Unidos de suspender su contribución a la Unesco afectará a las poblaciones beneficiarias del trabajo especializado que realiza la agencia, advierten delegados los países miembros.
Washington tomó la decisión horas después de que los miembros de la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) incorporaran a Palestina con todos los derechos, el 31 de octubre.
"La retención de aportes y otras contribuciones económicas obligada por dos leyes por de Estados Unidos debilitará a la Unesco y socavará su capacidad para construir sociedades abiertas y libres", señaló la directora general de la organización, Irina Bokova.
"Los fondos de Estados Unidos se utilizan para crear y mantener medios de comunicación libres y competitivos en Iraq, Túnez y Egipto", declaró. "En Afganistán, su contribución ayuda a enseñar a leer y a escribir a miles de oficiales de policía", añadió.
Los programas de alfabetización en zonas de conflicto "desarrollan la capacidad crítica de la gente, lo que le da confianza para luchar contra el extremismo violento", indicó Bokova, y añadió que la agencia también capacita a periodistas en la cobertura veraz de elecciones "para mantener el espíritu democrático de la Primavera Árabe".
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Washington anunció que retendrá 60 millones de dólares que tenía previsto pagar antes de fin de año, pues dos leyes vigentes prohíben colaborar con la Organización de las Naciones Unidas (ONU) o cualquiera de sus agencias que acepten a Palestina como estado independiente.
Bokova llamó al "gobierno, al Congreso legislativo y al pueblo estadounidense a encontrar la forma de seguir apoyando a la Unesco en estos tiempos turbulentos".
La solicitud de Palestina generó malestar en la 36 sesión de la Conferencia General, uno de los dos órganos de decisión de la Unesco, que comenzó el 25 de octubre y terminará este jueves 10.
El encuentro tuvo una inusual atención mediática y mayores medidas de seguridad que lo habitual por la petición de Palestina y la presión de Estados Unidos, entre otros países, para rechazarla.
En el plenario de la semana pasada, 107 países votaron a favor de la solicitud palestina, 14 en contra y 52 se abstuvieron. Sorprendió el "sí" de Francia, y el abrumador apoyo de África resumido en la respuesta de Sudán: "Sí, ahora sí".
Los estados de Asia y de América Latina también estuvieron a favor, además del esperado apoyo de China, India y los países árabes, incluido el nuevo gobierno de Libia.
La votación fue seguida de un fuerte y prolongado aplauso de muchos de los presentes. Numerosos países argumentaron su voto con declaraciones destinadas sobre todo a explicar su posición ante sus propios públicos domésticos.
La integración de Palestina es "prematura", arguyó Estados Unidos, al no haber acuerdo sobre la solución de dos estados. Algunos de los países que votaron en contra o se abstuvieron, justificaron su decisión alegando que el Consejo de Seguridad de la ONU todavía tenía a estudio la solicitud inicial.
Lo sucedido en la Unesco puede tener efectos positivos en esa petición, presentada por el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmoud Abbas, a la Asamblea General de la ONU el 23 de septiembre.
Pero Estados Unidos tiene derecho de veto en ese órgano y ya dijo que lo usaría.
Si Washington no cambia de posición, África y otras regiones aquejadas por guerras sufrirán las consecuencias del recorte de fondos.
La Unesco colabora con escuelas móviles en países como Kenia para llegar a las poblaciones nómades. También promueve la igualdad de género en la educación en estados donde la discriminación contra las mujeres es importante.
"Es responsabilidad de los países miembro asegurar que la Unesco no sufra de forma excesiva", señaló Bokova, quien hizo prioridad la educación de niñas y mujeres desde que fue investida directora general hace dos años.
"Pienso en las miles de niñas y mujeres de Afganistán, África y otras partes del mundo que aprendieron a escribir con ayuda de la Unesco", declaró.
Miembros de la delegación palestina esperan que Estados Unidos cambié de actitud. Ese país es el mayor contribuyente de la Unesco, responsable de aportar unos 80 millones de dólares por año, 22 por ciento de su presupuesto. Le sigue Japón, que se abstuvo en la votación de la Conferencia General.
Cada miembro tiene un voto, independientemente de su contribución económica.
El canciller palestino, Riyad al-Maliki, quien dio un apasionado discurso antes de la votación, declaró luego que su delegación estaba preocupada por la cuestión financiera.
Pero señaló que la Unesco se las había ingeniado para continuar con su trabajo cuando Estados Unidos recurrió al mismo método de presión, entre 1984 y 2003. Esta votación no tiene nada que ver con la solicitud de reconocimiento del estado palestino, presentada en la Asamblea General, observó.
"Hablamos de áreas específicas, educación, ciencia y cultura, y queremos desempeñar un papel importante en ellas", declaró a la prensa. Hace 22 años que Palestina trata de integrarse a la Unesco, en cambio la petición a la ONU se presenta ahora por primera vez, añadió.
Los representantes favorables a la causa palestina quedaron satisfechos con el resultado de la votación, pero también preocupados por el impacto económico que tendrá en la Unesco.
El representante de Malta, Ray Bondin, señaló que la legislación estadounidense fue concebida para combatir a la Organización para la Liberación de Palestina y no debería aplicarse a los palestinos en la actualidad.
"Es una nación. Es Palestina. Tiene derecho a estar aquí como cualquiera de nosotros", dijo a IPS. "¿Qué derecho tenemos de decirles que no? El presidente Abbas se ha esforzado mucho para tratar de calmar las aguas e instaurar la paz en la región. No es fácil para un pueblo que ha sufrido tantos años", añadió.
Pese a las consecuencias, Palestina "debe ser reconocida por lo que es, una nación separada, y permitírsele negociar como tal", sostuvo Bondin.
La Unesco se dedica a la cultura y al patrimonio, no a asuntos políticos, arguyó. El resultado de la votación "es adecuado para esta agencia. Es un paso que quedará para la historia", añadió.
Le debíamos la integración a Palestina, aunque se traduzca en medidas punitivas para África, coincidió la representante de Gambia, Bojang Sukai.
"Es lo correcto y creo que la Unesco debe felicitarse por ofrecer una plataforma para el reconocimiento de Palestina", indicó. "Es hora de que los palestinos puedan decidir y tengan una oportunidad de desempeñar su papel en el mundo", añadió.
