El Pacto Mundial para el Empleo, un instrumento adoptado este viernes por gobiernos, sindicatos y empleadores en la OIT para afrontar la actual crisis económica global, permitirá transformar esa circunstancia negativa en una oportunidad, según uno de los protagonistas de ese acuerdo.
Daniel Funes de Rioja, presidente del Grupo de Empleadores en la OIT (Organización Internacional del Trabajo), opinó que la única salvación ante la crisis para los países de América Latina es el empleo, porque carecen de redes de seguridad social.
En ese sentido, la crisis ofrece la ocasión de ir a la búsqueda de un seguro integral y también de acortar la brecha entre la recuperación de la economía y del empleo, dijo a IPS el experto argentino, representante de la Organización Internacional de Empleadores.
IPS: ¿Es realista, desde el punto de vista práctico, la idea de vincular el régimen tripartito de la OIT (gobiernos, sindicatos y empleadores) a las actividades de elaboración de políticas anti-recesivas?
DANIEL FUNES DE RIOJA: Desde nuestra parte y desde esta casa tripartita tenemos una profunda convicción de que una crisis de confianza como ésta necesita para su recuperación estar acompañada de un fuerte diálogo social y, si es posible, de un fuerte apoyo de políticas acordadas en esa línea.
Esa fue la decisión que tomamos en la OIT desde noviembre de 2008, y luego en marzo, y que nos llevó a este pacto global.
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IPS: ¿Cuál es la propuesta del Pacto?
DFDR: La idea es que haya un marco de políticas, integradas y simultáneas que atiendan tanto a la promoción de la empresa sustentable, de políticas activas en el mercado de trabajo, de redes de protección social en donde no las haya, y que además oriente hacia economías más sanas desde el punto de vista macro.
Pero también que sean más inclinadas hacia la producción no contaminante y favorable al ambiente. Todo esto en el marco de aprovechar la crisis para que sea una oportunidad. Lamentablemente tenemos que sufrir la crisis. Pues bueno, que sea corta.
IPS: ¿No debería dejarse esto en manos de gobernantes y políticos?
DFDR: Yo creo que eso requiere de un respaldo de los factores de la producción, no sólo del arco político, porque en realidad es un esfuerzo transformador muy fuerte que, además desde el punto de vista práctico puede acortar los efectos nocivos de la crisis y evitar determinadas tensiones porque permite tener un ojo en todos los factores.
IPS: En un reciente debate aquí en la OIT, usted pidió a los panelistas que le indicaran cuáles políticas "de economía de mercado capitalistas" serían útiles para reducir esa brecha entre la recuperación de la economía y del empleo.
Pero los representantes del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional sólo le respondieron con ejemplos de políticas de intervención del Estado. ¿Qué reflexiones le merecen esas respuestas?
DFDR: La economía de mercado no niega el Estado. Lejos de ello. No hay mercado sin Estado, porque en definitiva para que haya derecho de propiedad tiene que haber un régimen legal que lo garantice.
Así que este criterio de mercado sin Estado o Estado sin mercado es una discusión, primero utópica y además desde el punto de vista práctico no tiene ningún sentido.
IPS: O sea, ¿como representante de los empleadores usted acepta las regulaciones del Estado?
DFDR: El mercado tiene que tener regulaciones, pero deben ser realistas, flexibles e inteligentes como ahora se esta diciendo, a los efectos de poder desarrollarse.
Ahora, en el marco de una crisis tan profunda donde ha habido un corte del financiamiento es evidente que los estados juegan roles. Y esto lo estamos viendo, lo estamos viviendo y nadie desde el mundo capitalista va a rechazar ello, al menos siempre y cuando tenga la visión de ser, primero a tiempo, porque si no es a tiempo no sirve.
Segundo, que tenga objetivos muy precisos. Tercero, como lo dijo el propio presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero cuando estuvo aquí en la OIT en noviembre, que sea temporario. Es decir, voy a reanimar los mercados, a ayudarlos, con políticas activas. Eso esta perfecto y, en ese contexto, esas políticas activas tienen que ir acompañadas también de redes sociales.
IPS: ¿Qué relación guarda la previsión social con la crisis y con el Pacto Mundial para el Empleo?
DFDR: Fíjese lo que ocurre en América Latina, y en Argentina, mi país, en particular. La única salvación ante la crisis es el empleo, porque no hay redes de seguridad social. Entonces, ¿qué termina pasando? Que la crisis termina sofocando a la pequeñas empresa cuando no puede mantener el empleo de antes, cuando no están dadas las condiciones, cuando no tiene el crédito o no tiene mercado.
IPS: ¿Cuál es la enseñanza?
DFDR: Que nosotros debemos aprovechar la oportunidad que nos brinda este escenario de la crisis y mediante el Pacto Mundial. Primero para acortar el tiempo de la recuperación económica, y segundo para cortar la brecha entre recuperación de la economía y del empleo. Tercero, para diseñar una estrategia que nos permita una etapa procíclica más larga y más estable.
IPS: ¿Eso sería todo?
DFDR: No, para poder aguantar otros cimbronazos necesitamos una buena red social, como pasa en países que lamentablemente están viviendo situaciones muy complejas, como España, cuyo modelo productivo esta en crisis por la caída de las actividades, pero, sin embargo, puede balancearlo porque genera otros espacios y la red social aguanta.
Yo creo que tenemos que ir a la búsqueda de un seguro integral con entrenamiento laboral, con desarrollo profesional y con el objetivo de volver al empleo.