El partido del presidente de Rusia, Vladimir Putin, seguramente ganará con comodidad las elecciones parlamentarias de este domingo, en medio de acusaciones de acoso a la oposición y coerción a los votantes.
La Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europea (OSCE) se disponía a enviar observadores, pero desistió de la idea a último momento con el argumento de que Moscú demoraba la entrega de las visas y había limitado su número a apenas 70 para todo el territorio del país más extenso del mundo.
Yevgeny Volk, investigador en la oficina local del centro de estudios conservador estadounidense Heritage Foundation, señaló que en la mayoría de las democracias se conocen las reglas de juego del proceso electoral y que el resultado no es público, se supone, antes de los comicios.
"En Rusia, sin embargo, generalmente se sabe quién será el ganador con bastante anticipación. Es el proceso electoral lo que resulta un misterio año tras año", acotó Volk.
"La persistente manipulación del gobierno —campañas sucias, imposibilidad de la oposición de acceder a los medios de difusión, la negativa del oficialismo a participar en debates— ha degradado la democracia en este país", afirmó.
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"El elevado número de partidos que competirán en los comicios no constituye un signo de fortalecimiento democrático, sino la prueba de la debilidad de una oposición dividida y la creciente popularidad de grupos marginales, extremistas y ultranacionalistas", agregó.
El fin de semana pasado, a ocho días de las elecciones, la policía dispersó manifestaciones opositoras en Moscú, San Petersburgo y varias ciudades pequeñas, organizadas por la coalición llamada popularmente La Otra Rusia.
Las fuerzas de seguridad arrestaron a uno de sus máximos dirigentes y a varios participantes en la demostración, entre ellos el ex campeón mundial de ajedrez Garry Kasparov.
La policía antimotines también detuvo a Boris Nemtsov y Nikita Belykh, líderes de la Unión de Fuerzas de Derecha, quienes son candidatos en las elecciones. Luego fueron liberados.
Pero Kasparov fue acusado de alterar el orden público y fuentes policiales confirmaron que lo mantendrían arrestado durante cinco días como sanción administrativa.
La portavoz de un tribunal moscovita, Anna Usachyova, dijo a la prensa que el ex ajedrecista fue encontrado culpable de desobediencia civil y de violar las disposiciones que reglamentan las demostraciones públicas.
"Se aplicaron a Kasparov cinco días de prisión preventiva, a contar desde el momento de su detención. Fue puesto bajo arresto en la sala del tribunal", agregó.
Los otros casos, incluido el de Alexander Averin, secretario de prensa del prohibido Partido Nacionalista Bolchevique, serán tratados esta semana, señaló Usachyova.
Elena Ryabinina, del no gubernamental Centro de Derechos Humanos Memorial, dijo a IPS que su organización planea enviar cartas al estatal comisionado de Derechos Humanos de Rusia, Vladimir Lukin, a la directora del Consejo Presidencial de Derechos Humanos, Ella Pamfilova, y también a organismos internacionales.
Asimismo, realizarán una reunión extraordinaria para analizar las violaciones a las libertades civiles en el país.
El gobierno ha montado una agresiva campaña para asegurar la victoria del partido de Putin, Rusia Unida. La oposición asegura que el objetivo es lograr que el presidente conserve en sus manos el poder real incluso luego del término de su segundo mandato en mayo de 2008.
La Constitución no le permite presentarse a una nueva reelección, pero Putin ha participado activamente en la campaña. En todo el país se pueden ver en las calles los afiches con la consigna del partido oficialista: "El plan de Putin es la victoria de Rusia".
Este domingo, alrededor de 100 millones de rusos votarán para elegir 450 miembros de la Duma, la cámara baja del Parlamento ruso.
A diferencia de las anteriores elecciones legislativas, todos los diputados serán elegidos por medio de las listas presentadas por los 11 partidos que compiten en los comicios.
Las bancas se adjudicarán de acuerdo con el sistema de representación proporcional entre las fuerzas que obtengan al menos siete por ciento de los votos.
La Comisión Central Electoral informó que han presentado candidatos el Partido Agrario, Fuerza Civil, el Partido Demócrata de Rusia, el Partido Comunista, la Unión de Fuerzas de Derecha, el Partido de la Justicia Social, el Partido Demócrata Liberal, Rusia Justa, Patriotas de Rusia, Rusia Unida y el liberal Yabloko.
La Comisión también señaló que los partidos que obtengan bancas tendrán el derecho a nominar candidatos presidenciales sin necesidad de recolectar firmas que los avalen.
Las encuestas indican que sólo podrían obtener bancas entre dos y cuatro agrupaciones políticas: la oficialista Rusia Unida, el Partido Comunista, el Demócrata Liberal y Rusia Justa, en este orden.
En una conferencia con representantes de Rusia Unida, Putin señaló que aumentar las jubilaciones será uno de los desafíos futuros más importantes. Dijo que su partido había definido como una de sus prioridades el desarrollo de la infraestructura, al igual que la promoción de la educación, la salud y el sector agrícola.
Putin agregó que tenía la esperanza de que la próxima legislatura siguiera adelante con los actuales planes de desarrollo.
"Si la gente vota a Rusia Unida, si una abrumadora mayoría de ciudadanos vota por este partido, me darán el derecho moral de pedir cuentas a quienes estarán trabajando en el Parlamento y en el Ejecutivo por la puesta en práctica de las decisiones tomadas hoy", afirmó Putin.
