Las persistentes y en algunos casos torrenciales lluvias que azotaron especialmente a las provincias orientales de Cuba en las últimas semanas no significan que la sequía en esas y otras regiones del país haya retrocedido, aunque sí beneficiaron a la agricultura. En la oriental provincia de Guantánamo, si bien fueron intensas, las precipitaciones en promedio no llegaron a los 90 milímetros. «Los campos sembrados se beneficiaron, pero no se puede decir que ya no haya sequía», indicó a Tierramérica Ileana Lynfernal, del Centro de Meteorología de Guantánamo.
A su vez, un informe preliminar del Centro del Clima del Instituto de Meteorología señaló que en el país se mantienen varias zonas con déficit de lluvia.
Las lluvias actuales están asociadas a la temporada ciclónica, que va de junio a noviembre.
