Con el objetivo de mejorar la capacidad lectoescritora de alumnos del interior de Chile y promover su derecho a la comunicación, la RadioEscuela implementada en centros rurales por la Corporación La Morada aparece como un modelo de emisora educativa.
El inédito proyecto, lanzado en abril y que en su primera fase finalizará el 9 de agosto con un seminario internacional sobre comunicaciones relacionadas con la educación y la entrega de premios a los mejores programas, tendrá su amplia difusión en América Latina a través de emisoras afiliadas la Asociación Mundial de Radios Comunitarias (Amarc).
"El proyecto propone una modalidad denominada radio comunitaria en la escuela, que parte del presupuesto que en algunas zonas rurales los centros educativos todavía pueden liderar procesos culturales", explicó a IPS la creadora y coordinadora de RadioEscuela, Rosario Puga.
Aunque la radio no se escuche afuera de la escuela, "es un recurso disponible para el conjunto de la comunidad, dado que todo el desarrollo de contenidos apunta a que los equipos de producción —alumnos y profesores— recuperen claves de la historia local y cumplan un rol de mediación entre los distintos actores" sociales, acotó la profesional.
El proyecto contó con el financiamiento de Oxfam Internacional y el patrocinio del Ministerio de Educación.
La iniciativa se desarrolló en siete escuelas y liceos pertenecientes a dos comunas rurales de la provincia de San Felipe, ubicada en la región de Valparaíso y a unos 100 kilómetros al oeste de Santiago, "que están en el eje de la agroindustria exportadora", y otras dos de la provincia Cardenal Caro, en la región O'Higgins, a unos 200 kilómetros al sur de la capital chilena.
En ella participaron alumnos de entre 11 y 12 años que cursan sexto y séptimo básico (primaria) y otros de entre 14 y 15 años que están en primero y segundo medio (secundaria). Los establecimientos educacionales elegidos poseen un rendimiento académico menor al promedio nacional.
La primera etapa consistió en la realización de talleres de escritura de guiones dictados por profesionales de la organización no gubernamental Corporación La Morada, asociación sin fines de lucro de desarrollo social de mujeres, propietaria de Radio Tierra, un reconocido medio de comunicación comunitario.
En los cursos participaron más de 550 estudiantes, quienes aprendieron las técnicas necesarias para escribir radioteatros y micro radiales (relatos cortos). Puga comenta que se instó a los jóvenes a echar a volar su imaginación tomando como referencia tres grandes tópicos: "sueños", "afectividad" y "aventuras".
La mayoría se inclinó por la afectividad en clave de melodrama. "Hay mucha depresión, drogas y sexualidad vivida como trasgresión", indicó la coordinadora de RadioEscuela.
Pero una de las principales constataciones de Puga fue la extremada fragmentación de los mensajes.
"El impacto de las comunicaciones con su sobrefragmentación está imposibilitando procesos de formulación más completos de pensamientos en la población infantil, sean estos críticos o descriptivos", reflexionó..
Pero a su juicio, esto es un problema transversal, que no solamente afecta a las escuelas participantes ni a los sectores socioeconómicos más desfavorecidos del país.
Todos los programas fueron grabados por actores y actrices profesionales y musicalizados por los estudiantes. Los radioteatros y micro radiales se distribuirán a 50 radioemisoras de América del Sur y América Central que integran Amarc.
La tercera fase del proyecto es el desarrollo de un concurso en el cual se premiará a los cuatro mejores trabajos, quienes se adjudicarán la instalación de una moderna radio en su centro educativo y cuatro meses de capacitación de equipos de producción.
Los ganadores tienen el compromiso de diseñar proyectos de comunicación, los que se pondrán en marcha a partir de marzo de 2008 y durarán seis meses como mínimo.
Entre los miembros del jurado, se encuentra Damian Valls, académico de la Universidad de Buenos Aires y fundador de la radio comunitaria FM La Tribu, Cecilia Millán, en representación de Oxfam, Tomás Mosciatti, director de la radio chilena Bío-Bío, y María Pía Matta, directora de la Corporación la Morada y vicepresidenta de Amarc.
"Creo que el gran potencial de las radios escolares, por lo menos en su primera etapa de puesta en marcha, es el rol de mediación al interior de la cultura escolar, ya que estamos hablando de centros educativos grandes, con una convivencia escolar tremendamente compleja", sostuvo Puga.
"A partir del clima que ha ido generando el país para los jóvenes, de creciente confrontación, con señales de criminalización de la conducta juvenil, uno se da cuenta que, o establecemos niveles de diálogo, de circulación de los discursos propios de la juventud, o nos estamos sentando sobre una situación tremendamente explosiva", alertó.
"El desafío para nosotros es hacer una sistematización, desarrollar un modelo que podamos replicar, producir" en otros establecimientos educacionales del país, indicó la profesional.
Un paso en esta dirección se dará el 9 de agosto, cuando se realice la premiación de las cuatro escuelas ganadoras en un seminario latinoamericano sobre Comunicación y Educación, al que están invitados estudiantes, profesores, periodistas y trabajadores de radio, que van a poner en discusión el proyecto Radio Escuela y lo compararán con otros modelos existentes en la región.
Por ejemplo, habrá una exposición sobre las radios escolares del norte de Argentina y la experiencia de la radio Vilardevoz, realizada y conducida por pacientes psiquiátricos del hospital Vilardebó de Montevideo.
"Queremos que la sistematización de experiencias sea la punta de lanza para proponerle al ministerio (de Educación) que los Proyectos de Mejoramiento Educativo que incorporen la radio empiecen a trabajar con un modelo de gestión" para no seguir distribuyendo equipamientos a ciegas, explicó Puga.
"Hemos tenido contactos con radios escolares regionales que nos dicen: 'saben, nosotros tenemos una radio, pero no sabemos qué hacer con ellas'", comentó a modo de ejemplo.
