El presidente venezolano Hugo Chávez clamó por poder bañarse un día no lejano en el emblemático río Guaire, que cruza Caracas de oeste a este en 53 de sus 70 kilómetros de recorrido y recoge aguas residuales domiciliarias e industriales. Lo hizo al enumerar programas de mejoramiento después de inaugurar, el martes, una nueva línea del tren subterráneo de la urbe.
La ministra de Ambiente, Jacqueline Farías, dijo a Tierramérica que «ese sueño comenzará a ser posible a partir de octubre, cuando estrenemos el sistema de colectores para aguas servidas en aproximadamente la mitad del recorrido».
Así, el Guaire achicará su caudal pero ofrecerá aguas más limpias.
A su término, antes de desembocar en el río Tuy, se instalará una planta de tratamiento. El proyecto, que cuesta 450 millones de dólares, se completará en 2013, informó Farías.
