El próximo 4 de septiembre se realizará la segunda audiencia en la Organización Mundial de Comercio (OMC) para discutir las restricciones a las importaciones de neumáticos reciclados en Brasil. Si la victoria resulta brasileña, otros países podrán mantener medidas jurídicas y políticas públicas semejantes de protección ambiental.
«Si la decisión no nos favorece, sería un gran retroceso para la legislación en el país, ya que se abriría un precedente para la importación de residuos tales como computadoras usadas», explicó a Tierramérica la gerenta del Proyecto de Reducción de Riesgos Ambientales del Ministerio de Medio Ambiente, Maria Gricia de Lourdes Grossi.
Según ella, la derrota no sería sólo brasileña, pues «también serían afectados países en desarrollo que desean restringir la entrada de residuos en sus territorios».