PETRÓLEO: Precios suben por nerviosismo en refinerías

Los precios internacionales del crudo cerraron este viernes sobre los 55 dólares para el barril de 159 litros, al cabo de una semana de alzas motivada principalmente por dudas acerca de la capacidad de las refinerías estadounidenses para atender la demanda de este verano boreal.

El crudo West Texas Intermediate (WTI), marcador estadounidense, se vendió este viernes a 55,03 dólares el barril en el mercado de Nueva York, con un alza de 1,20 dólares sobre la cotización del jueves y el precio más alto desde el 22 de abril.

En Londres, el Brent, crudo de referencia en Europa, ganó 56 centavos durante la jornada y se vendió a 52,96 dólares el barril, en tanto el jueves en algunas transacciones llegó a tocar 53,97 dólares, el valor más alto desde el 27 de abril.

Los promedios de la semana fueron 53,11 dólares para el barril de WTI, 51,96 dólares para el Brent y 49,24 dólares para la cesta de siete crudos que utiliza la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), informó el Ministerio de Energía en Venezuela.

”La inquietud persiste acerca de si la oferta de gasolina y de otros combustibles como el gasóleo será suficiente para atender la demanda que se prevé en los meses de verano e invierno en Estados Unidos”, estimó el informe semanal venezolano.

Agregó los problemas concretos en refinerías estadounidenses y ”la preocupación por el comienzo de la época de huracanes que se prolonga hasta finales de noviembre, que se prevé activa como la del año pasado”, cuando el arribo de temporales a las costas del golfo de México forzó el cierre temporal de algunas instalaciones petroleras.

El consorcio angloholandés Shell informó que su refinería en Deer Park (en el sureño estado estadounidense de Texas), la sexta de Estados Unidos y capaz de procesar 340.000 barriles por día, que posee en sociedad con el grupo estatal mexicano Pemex, regresará a la normalidad este fin de semana después de varias jornadas en que algunas de sus unidades estuvieron paradas.

La corporación estadounidense Exxon, por su parte, paralizó varios hornos en la unidad que destila gasolina en la refinería más grande de su país, la de Baytown (también en Texas), que puede procesar 557.000 barriles diarios.

Como las refinerías estadounidenses trabajaron en mayo a 95 por ciento de su capacidad, las dificultades en algunas plantas ponen en evidencia el escaso margen para atender holgadamente contingencias o alzas sostenidas en la demanda.

Las refinerías tratan de asegurarse mejores márgenes de intermediación con aprovisionamientos tempranos de crudo, ”pues el mercado teme que pueda presentarse una escasez global en el próximo invierno (boreal)”, según Frederic Laserre, responsable de investigación de mercados en la firma francesa SG Securities.

La posibilidad de que la OPEP decida abrir o cerrar sus grifos, a fin de apuntalar los precios y atender la demanda, es un factor que cíclicamente inquieta a los grandes consumidores, pero en las últimas semanas hubo señales tranquilizadoras en la materia.

La OPEP está integrada por Arabia Saudita, Argelia, Emiratos Árabes Unidos, Indonesia, Irán, Iraq, Kuwait, Libia, Nigeria, Qatar y Venezuela, y sus ministros petroleros se reunirán en Viena el próximo 15 de junio para examinar el mercado.

Esa organización produce actualmente casi al máximo de su capacidad, unos 30 millones de barriles diarios que cubren aproximadamente 36 por ciento de la demanda global, y aporta más de la mitad del petróleo que se comercializa internacionalmente.

No obstante, los consumidores piden a la OPEP que produzca más crudo, y este viernes Rupert Krietemeyer, portavoz de la Comisión Europea (organismo ejecutivo de la Unión Europea) dijo que se estudia solicitar al grupo exportador que incremente su oferta.

Pero en la OPEP los defensores de ”precios justos”, como Venezuela, rechazan esas demandas. ”Nuestra posición debe ser mantener la producción o recortar”, dijo el ministro venezolano de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez.

El actual presidente de la OPEP y ministro petrolero kuwaití, Ahmad al-Sabah, opinó que ”la situación seguirá manteniéndose con nuestra producción de ahora, a menos que pase algo inesperado para nuestro encuentro del 15 de junio”.

”Ya consulté con algunos miembros” sobre eso, añadió.

También el ministro petrolero de Argelia, Chakib Jelil, pronosticó que la producción pactada de la OPEP ”muy probablemente” se sostendrá en sus niveles actuales.

Productores de fuera de la OPEP tampoco pueden aportar mucho más. ”México, que extrae 3,38 millones de barriles diarios, ya produce a máxima capacidad y no puede incrementar su oferta en este momento”, dijo el secretario (ministro) de Energía de ese país, Fernando Elizondo.

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