Cinco periodistas de Colombia, Cuba, Kosovo y Pakistán recibirán este año los premios internacionales a la Libertad de Prensa concedidos anualmente por el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
Todos ellos fueron golpeados, encarcelados, exiliados o amenazados debido a su trabajo, según el CPJ, con sede en Nueva York, que entregará los premios el próximo martes en una ceremonia en el hotel Waldorf-Astoria, en esa ciudad.
La periodista premiada de Colombia será María Cristina Caballero, quien recibió numerosas amenazas de muerte debido a su cobertura de la violencia y la guerra civil en su país.
Caballero es considerada una de las reporteras mejor conectadas de Colombia, y recibió amenazas de casi todas las partes en un país donde en la última década fueron asesinados más periodistas que en ninguna otra parte del mundo.
Sólo el año pasado fueron asesinados cuatro comunicadores colombianos, y tres más en lo que va de 1999, de acuerdo con el CPJ.
Caballero se ganó peligrosos enemigos debido a sus entrevistas con narcotraficantes, líderes guerrilleros y el conductor de las fuerzas paramilitares de Colombia, Carlos Castaño. La periodista escribió artículos para las publicaciones El Tiempo, Cambio 16 y Semana.
"Los comunicadores exponen los hechos y entonces se vuelven objetivos militares de estos grupos", explicó.
No sólo está en aumento el secuestro de periodistas, sino también los ataques a oficinas de periódicos. "La libertad de prensa es víctima de la guerra civil de Colombia", lamentó Caballero, y sugirió que los medios de Estados Unidos podrían ser de mucha ayuda intensificando su cobertura de esa situación.
El periodista galardonado de Cuba será Jesús Díaz Hernández, quien actualmente cumple una pena de prisión de cuatro años en ese país por fundar una agencia de noticias independiente.
Díaz, de 25 años, fue detenido el 18 de enero de este año y al día siguiente fue hallado culpable de "peligrosidad".
Al igual que muchos periodistas cubanos independientes, Díaz se valió de Internet para eludir la censura. El procedimiento consiste en contar historias por teléfono a colegas en el extranjero, que luego las publican en páginas Web.
Los artículos son muchas veces recogidos por diarios de Europa y Estados Unidos, y a veces llegan de vuelta a Cuba.
Miembro activo del Comité Cubano para los Derechos Humanos, Díaz comenzó a trabajar para la agencia independiente Patria en 1995 y fundó la Cooperativa Avilena de Periodistas Independientes el pasado diciembre.
Sentenciado a cuatro años de prisión, Díaz inició una huelga de hambre y se negó a tomar agua durante 10 días. Desde entonces pasó ocho meses en reclusión solitaria y fue amenazado con un agregado de 20 años a su pena por tratar de sacar sus escritos de la cárcel.
Otro premiado será Baton Haxhiu, editor del diario independiente Koha Ditore, de la provincia serbia de Kosovo.
Haxhiu recibió amenazas de muerte tanto de las fuerzas serbias como del rebelde Ejército de Liberación de Kosovo por su cobertura de la relación entre la mayoría albanesa de esa provincia y el gobierno de Yugoslavia.
"Tratamos de mantenernos vivos por la sociedad civil, el diálogo y quizá por una sociedad multiétnica", declaró.
Así mismo, será galardonado el matrimonio paquistaní conformado por Najam Sethi y Jugnu Mohsin, editores de la publicación The Friday Times, de Lahore.
Sethi fue golpeado, secuestrado y encarcelado por denunciar actos de corrupción durante el gobierno de Nawaz Sharif, derrocado por un golpe militar el mes pasado.
"En muchos países, el periodismo independiente es algo muy peligroso", señaló Ann Cooper, directora ejecutiva del CPJ, en una conferencia de prensa celebrada en Washington con la presencia de todos los nominados, excepto Díaz Hernández. (FIN/IPS/tra-en/jl/mk/mlm/cr-hd/99
