El gobierno de Turquía "debe solucionar el problema kurdo" y aceptar plenamente a esa minoría étnica, exhortaron los ganadores del premio Nobel de Literatura Günter Grass y José Saramago.
Grass (Alemania) y Saramago (Portugal) se sumaron el lunes a los también ganadores del Nobel de Literatura Nadine Gordimer (Sudáfrica) y Elie Wiesel (Estados Unidos), junto a otros intelectuales y artistas de renombre internacional, para exigir el respeto de los kurdos.
El Estado de Turquía combate desde hace décadas a la guerrilla kurda que lucha por la autodeterminación de los 12 millones de kurdos de este país de 65 millones de habitantes.
"Queremos que Turquía sea un exponente líder en el respeto de los derechos y la democracia. Creemos que este país, que es una parte integral del mundo civilizado, tiene la voluntad y la fe para implementar la libertad, la igualdad y la justicia para todos los pueblos", reza la declaración del grupo.
El pedido cuenta con el apoyo de los directores de cine Ingmar Bergman, de Suecia, y Costa Gavras, de Grecia, los escritores británicos Harold Pinter y John Berger, el coreógrafo de ballet francés Maurice Béjart y el ex ministro de Cultura de Francia Jack Lang.
La lista de los firmantes incluye además al periodista y activista polaco Adan Michnik, al periodista Arne Ruth y la directora de cine y actriz Liv Ullmann, de Suecia, y a los escritores Richard Falk, de Estados Unidos, y Antonis Samarakis, de Grecia, anunciaron en una conferencia de prensa los intelectuales turcos que promueven la iniciativa.
"Por favor, salven a Turquía de la vergüenza", es lo que pidió el grupo al presidente Suleyman Demirel, al primer ministro Bulent Ecevit y al parlamento.
La petición corresponde a una iniciativa conjunta del novelista Yasar Kemal, el embajador de Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), músico y escritor Zulfu Livaneli, los novelistas Orhan Pamuk y Ahmet Altan y el escritor Mehmed Uzun.
La campaña fue lanzada mientras la mayoría de los países de la Unión Europea (UE), incluso Grecia, rival tradicional de Turquía en la región, están dispuestos a levantar sus objeciones contra el pedido de Ankara para integrarse al bloque regional.
La cumbre de la UE, prevista para diciembre en Helsinki, será una ocasión clave para Turquía, que hace mucho tiempo pretende ser admitida como miembro del bloque.
"Nos gustaría ser parte de Europa. Esa es una de las razones por las cuales criticamos abiertamente la situación de los derechos humanos de Turquía", declaró a la prensa el novelista Orhan Pamuk.
"Ellos (las autoridades turcas) estallarán de ira al escuchar nuestros pedidos. Pero eso es lo que queremos, ya que sólo si discutimos nuestros problemas en voz alta podremos convertirnos en un país abierto", explicó Pamuk.
"Aunque no podamos discutir la cuestión kurda aquí, se discute en otros lados de todos modos", agregó.
"Todos estamos a favor de la entrada de Turquía en la UE. Este país es heredero de una de las principales civilizaciones de la historia. Sin embargo, quedó manchado por discriminar a otras culturas, en su temor a quedar desmembrado", declaró el novelista Yasar Kemal.
Los signatarios calificaron de violento esfuerzo de asimilación al modo en que Turquía se manejó respecto de la cultura kurda y que concluyó con la "ilegalidad de la lengua kurda para la educación, la enseñanza y la comunicación".
"En base a esa supresión, innumerables individuos fueron arrestados y castigados. Decenas de miles de ciudades, pueblos, caseríos, montañas, valles y colinas cambiaron de nombre, para volverse turcos. A veces, los kurdos son llamados 'turcos de las montañas'. La constitución y otros códigos apoyan esa actitud", denunciaron.
"Sin embargo, ninguna de esas medidas resultó eficaz. Las políticas de asimilación no funcionaron y no lo harán tampoco en el futuro. No se puede convertir a los kurdos en turcos. Lo mejor sería liberar a la cultura kurda e incorporarla al patrimonio multicultural de Turquía", recomendó Yasar Kemal.
"En Turquía hay guerra y muerte desde hace 20 años. Desafortunadamente, el país perdió la lucha por la civilización en su apuesta por ganar la guerra kurda. En adelante, nos gustaría hablar de vida, una vida libre y próspera, o el país se pudrirá", pronosticó el novelista Ahmet Altan.
"Ya está podrido, se pudrió la conciencia de las dos partes del conflicto", agregó Yasar Kemal.
Los novelistas le piden al gobierno que "no discrimine más" a sus ciudadanos kurdos, y que "respete sus derechos y su dignidad para que puedan ser otra vez una entidad dinámica en Turquía".
"El kurdo debe convertirse en lengua para la educación y el aprendizaje. Hay que reconocer la necesidad de una radio y televisión kurdas, y brindar garantías constitucionales a la lengua, la cultura y la identidad" de esa etnia, exigen los signatarios.
Los intelectuales esperan que su campaña contribuya al clima de reconciliación engendrado sobre todo por la actitud que adoptó el líder kurdo Abdullah Ocalan durante su juicio por traición, que le acarreó una sentencia de muerte.
Ocalan, que lidera el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), propuso terminar con la lucha armada, ordenó que los milicianos del PKK se retiren del territorio turco, y dejó de reclamar la independencia para su pueblo.
La estrategia de Ocalan fue tratada oficialmente de "táctica habitual del PKK", pero hay señales de que el gobierno turco atendió la propuesta, ya que el levantamiento de la presión contra los alcaldes prokurdos en ciertas provincias parece una respuesta conciliatoria.
"Somos testigos de un hecho histórico. Los intelectuales más famosos del mundo y del país se unen para tratar la cuestión de la paz", declaró el vicepresidente de HADEP (Partido de la Democracia Popular), vinculado al PKK, Osman Ozcelik, que participó en la conferencia de prensa del lunes.
"Espero que hagan una gran contribución al proceso de paz que se desarrolla gracias a esfuerzos no oficiales", agregó.
Ozcelik indicó que existe una iniciativa paralela, un "grupo de contacto" formado por intelectuales, políticos y académicos turcos y kurdos, que pretenden encontrar una "solución al conflicto".
"El grupo lanzará una 'Iniciativa para la Democracia', a principios de noviembre, para que las gestiones de paz no se limiten a los artistas", dijo Ozcelik a IPS. (FIN/IPS/tra-en/ce/nm/ak/ceb/aq/hd/99