Venezuela quedó hoy convertida en escenario de una campaña electoral de un mes, durante la cual un millar de personas competirán por ser seleccionados para redactar una nueva Constitución.
Los candidatos podrán promoverse a través de los medios de comunicación y en actos públicos hasta 48 horas antes de las elecciones de la Asamblea Constituyente, previstas para el 25 de julio.
La nueva Constitución venezolana será preparada por 131 constituyentes, 128 de ellos elegidos en los comicios y otros tres representantes de las etnias indígenas que serán designados en un congreso especial, previsto para el 17 de julio.
La campaña comienza signada por la activa participación del presidente Hugo Chávez en la promoción de sus candidatos, un hecho cuestionado por independientes y opositores que genera una fuerte presión sobre el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El CNE analizaba este jueves en una larga sesión el tema de la participación de funcionarios públicos en el proceso, en especial después que Chávez fuera desafiante al declararse "en campaña" el domingo pasado.
"Me declaro el comandante de la Constituyente", dijo el mandatario, un teniente coronel retirado que declaró "moribunda" la Constitución vigente desde 1961
La elección de una Asamblea Constituyente es el principal proyecto del gobierno de Chávez, quien aspira generar un proceso de virtual refundación de la democracia.
Se da por descontado que el proceso de campaña estará marcado por una fuerte pugna política entre partidarios y opositores del presidente.
El día de las elecciones, los votantes deberán escoger hasta 10 candidatos nacionales de una lista de un centenar de aspirantes, y al mismo tiempo un número variable de aspirantes por cada una de las regiones del país.
Los candidatos figurarán en una boleta electoral con un número, su nombre y apellido, y en una decisión de último minuto también con su foto en blanco y negro.
La inclusión de la foto se produjo después que Chávez reclamara airadamente por una decisión anterior de no utilizarla, alegando que de esa manera se confundía a los electores por la dificultad para identificar a sus elegidos.
También ocurrió tras un veredicto de la Corte Suprema que apoyó al CNE en la decisión de no colocar símbolos partidistas en la boleta de votación, lo cual contrarió a la alianza oficialista del Polo Patriótico, identificados con una boina roja.
El Polo es practicamente la única fuerza partidista que identifica a sus candidatos. Los representantes de los partidos tradicionales que mantuvieron un predominio en los 40 años de democracia venezolana, aparecen por "iniciativa propia".
Además, los candidatos estarán identificados en una "gaceta electoral" donde figurara el nombre completo, su foto y su vinculación partidista.
Entretanto, quedó en evidencia la necesidad de realizar otro tipo de campaña, que informe a los votantes sobre el objetivo de la Asamblea Constituyente.
Una encuesta de la empresa Datanálisis publicada esta semana reveló que 55,6 por ciento de las personas cree que la Constituyente fue convocada para mejorar la situación económica del país.
La misma consulta advirtió que sólo 44 por ciento conocían la fecha exacta de los comicios. (Fin/IPS/lc/eg/ip la/99
