Una reunión de expertos que tendrá lugar del día 26 al 28 en México se propone promover el desarrollo de las microempresas en América Latina, sector que generó la mitad de empleos en la región en esta década.
Representantes de 26 países, incluidos invitados especiales de Estados Unidos, España, Holanda, Alemania y Japón, demandarán a los gobiernos mayor apoyo a los microempresarios y definirán herramientas para evaluar y fortalecer a ese sector.
En la cita, convocada por la organización no gubernamental mexicana Prodesarrollo, con respaldo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Corporación Andina de Fomento y el Citibank, se darán los primeros pasos para crear una red de instituciones y personas que respaldan a las microempresas en América Latina.
Las microempresas constituyen hoy un sector alternativo para el desarrollo de los negocios y la atención a los grupos sociales menos favorecidos, dice la convocatoria.
"El impacto de la microempresa en América Latina es significativo, pues según la Organización Internacional del Trabajo, hasta mediados de la década ha significado la mitad de los empleos creados en la región", dijo a IPS la coordinadora técnica de Prodesarrollo, Eve Hamilton.
En América Latina y el Caribe, 80 por ciento de los negocios cuenta con 10 empleados o menos. De esa cantidad, 80 por ciento tienen hasta cinco empleados.
Los apoyos a la microempresa, que se pretenden impulsar en la reunión de México, cubren aspectos financieros relacionados con la obtención de crédito y el servicio de ahorro, así como no financieros referidos al fortalecimiento institucional, la capacitación y la asistencia técnica.
"En términos sencillos, podríamos decir que el apoyo a la microempresa se da en tres niveles, dependiendo de las características del sector social al que van dirigidos. Así tenemos los bancos comunales, los grupos solidarios y los préstamos individuales", indicó Hamilton.
"Uno de los principales problemas que enfrentan las microempresas en América Latina es la falta de oportunidades para acceder al financiamiento bancario, pese a que el sector ha demostrado interés por integrarse a la economía formal", afirmó el director general de Citibank en México, Julio de Quesada.
Señaló que en el caso de México, 97 por ciento de las empresas son micros, pequeñas y medianas, representan 47 por ciento de la fuerza laboral y contribuyen con el 31 por ciento del ingreso nacional.
"Sin embargo, la banca comercial apoya únicamente al 10 o 15 por ciento de las 3,5 millones de microempresas que operan en el país, por lo cual casi la mitad del total se encuentra dentro de la economía informal", agregó.
De Quesada explicó que la falta de regulación del Estado y el escaso conocimiento de la banca tradicional sobre los mecanismos de financiamiento popular que maneja de la microempresa mantienen a este sector fuera del acceso a los préstamos y previó que a corto plazo se mantendrá esa tendencia.
"Deben crearse sistemas administrativos y fiscales simplificados y sencillos para permitir que los microempresarios queden comprendidos dentro del sistema, o de lo contrario, pese a la voluntad de todos seguirán manejándose dentro de la economía informal", agregó.
Sobre las regulaciones que se esperan de los gobiernos, el presidente de Prodesarrollo, Alfredo Hubard, dijo que el principal problema de los microempresarios es la complejidad de la estructura fiscal, que los obliga a presentar declaraciones de impuestos en algunos casos hasta tres, cuatro o 10 veces al mes.
"No importa pagar más o menos impuestos, sino que es muy complicado pagarlos", precisó.
El encuentro de México pretende el intercambio de experiencias, la difusión de las mejores prácticas, el diálogo con el sector privado, la sensibilización de los gobiernos sobre la necesidad de crear marcos regulatorios, el análisis de las innovaciones tecnológicas y la promoción de modelos exitosos.
El 20 por ciento de los asistentes al foro serán especialistas en microempresas y los restantes representantes de organizaciones no gubernamentales, instituciones financieras, cooperativas de ahorro y crédito, y organizaciones comunitarias, dijo Hubard.
Asistirán también representantes de gobiernos y de agencias de desarrollo internacional, añadió.
Hubard expresó su satisfacción por el interés que ha generado el Foro en América Latina y el Caribe, como revela el hecho de que asistirán al menos dos representantes de cada país de la región.
"Un 28 por ciento de los asistentes serán mexicanos, 25 por ciento sudamericanos, 20 por ciento centroamericanos, 15 por ciento estadounidenses, cuatro por ciento caribeños y el ocho por ciento restante expertos de Japón, España, Alemania y Holanda que han sido especialmente invitados", informó.
El encuentro tratará financiamiento de microempresas, retos para la promoción en las zonas rurales, metodologías para medir la importancia económica del sector, promoción del ahorro popular, experiencias exitosas en la distribución de productos, marcos regulatorios y los nuevos desafíos ante la globalización. (FIN/IPS/mb/ag/if/98
