El presidente de Colombia, Ernesto Samper, ofreció hoy a los trabajadores estatales en conflicto mediar ante los directivos de sus empresas para evitar una anunciada huelga.
Tras una reunión con el mandatario, el presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Luis Garzón, afirmó que se logró "habilitar un escenario para resolver los conflictos que enfrentan varios sectores".
Los sindicatos estatales de telecomunicaciones, energía eléctrica y petróleo anunciaron su propósito de realizar una huelga para obtener solución a sus respectivos conflictos.
Los empleados de la Empresa de Teléfonos de Bogotá (ETB) demandan el reintegro de 25 compañeros despedidos por la patronal por haber participado en un cese de actividades.
La legislación laboral sanciona con despido a los trabajadores que en desarrollo de sus protestas efecten l prestación de los servicios públicos básicos (teléfonos, energía y acueducto).
En la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Telecom), la Empresa Colombiana de Petróleos (Ecopetrol) y las de energía, los trabajadores rechazan los planes de privatización de servicios.
Samper se comprometió a buscar mecanismos que garanticen el debido proceso a 17 dirigentes de la Unión Sindical Obrera (USO), detenidos y sindicados de terrorismo.
En opinión de la USO, la detención de estos dirigentes apunta a penalizar la protesta sindical, pues la acusación de terrorismo partió de la participación de esos sindicalistas en una huelga realizada en 1991.
El paro anunciado por los trabajadores estatales sería el segundo en lo que va del año, tras el realizado en febrero para exigir el cumplimiento de varios acuerdos.
El anuncio de paro se da en momentos en que el gobierno inicia el diálogo para la aprobación del incremento del salario mínimo que regirá para cerca de cuatro millones de colombianos en 1998.
Los trabajadores han planteado que ese aumento se sitúe tres puntos por encima del índice de inflación con que cerrará 1997, que será de cerca del 18 por ciento, mientras que el gobieno propone que sea de 16 por ciento, la meta del costo de vida para 1998. (FIN/IPS/yf/dg/ip-lb/97
