Las negociaciones entre el Mercosur y Bolivia que se desarrollarán este jueves y el viernes en la capital de Uruguay presentan dificultades que hacen dudar en un acuerdo antes de la cumbre presidencial del bloque que se realizará en Fortaleza, Brasil, el 16 y 17 de noviembre.
El bloque sureño, integrado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, se reunirá con los delegados bolivianos para "tratar de llegar" con un consenso a la reunión.
El acuerdo marco entre el Mercosur y Bolivia, para que este país ingrese como asociado, se firmó en diciembre de 1995 en una reunión presidencial realizada en Punta del Este.
Los problemas comenzaron el 25 de junio durante una reunión realizada en la provincia argentina de San Luis, cuando comenzó la negociación.
Según la óptica mercosureña las dificultades para concretar una zona de libre comercio entre el Mercosur y Bolivia tienen su origen en que el país andino pretende imponer su condición de país de menor desarrollo relativo, dijo a IPS una fuente local del Mercosur.
El informante recordó que durante la reciente reunión realizada en Montevideo entre la Comunidad Andina y el Mercosur, éste último rechazó la pretensión andina de considerar especialmente a Ecuador como de menor desarrollo relativo para negociar.
Aunque su intercambio comercial es mayor con sus socios de la Comunidad Andina, Bolivia prefirió apostar al Mercosur, aunque sin abandonar a sus antiguos socios.
Los empresarios bolivianos han presionado a su gobierno señalando que las empresas de ese país no pueden competir con las del Mercosur, tanto por su calidad y volumen como por la infraestructura.
Las discrepancias están centradas en una lista de productos que incluyen, entre otros, alimentos, plásticos y químicos, incluidos por Bolivia en su lista de productos protegidos.
Según Bolivia la negativa del Mercosur de rebajar aranceles a algunos productos definidos por Bolivia como sensibles traba el acuerdo.
Dentro del bloque Argentina es la que se ha mostrado más intransigente, presionada por grupos empresariales que reclaman que se elimnen del acuerdo cláusulas que otorgan faciliades a Bolivia sin reciprocidad.
A juicio de los empresarios argentinos, Bolivia no produce muchos de los artículos que reclama proteger, y advierten que se puede producir una triangulación de productos introducidos desde extrazona.
El Mercosur parece tener mejores condiciones en la negociación, no solo por la solidez que presenta el bloque, sino también por la urgencia boliviana de que comience a regir una zona cuatro más uno de libre comercio a partir del 1 de enero de 1997. (FIN/IPS/rr/jc/if/96
