Una gigantesca tarta de 2,5 kilómetros de de largo fue devorada en minutos por hordas de festejantes que participaron en el primer día de celebraciones del 25 aniversario de Emiratos Arabes Unidos (EAU).
La tarta de dátiles y banano costó 82.000 dólares, y en ella trabajaron durante más de una semana 300 cocineros, quienes la colocaron a lo largo del arroyo Dubai.
El dulce banquete dio comienzo a las fiestas de aniversario de uno de los países más ricos del mundo, con ingresos anuales del petróleo de unos 9.000 millones de dólares.
La federación de siete estados, antes empobrecidos y dependientes de la pesca, las perlas y las guerras tribales, nada en dólares provenientes del petróleo y el gas natural, y organizó esta semana cinco días de festejos sin medir los costos.
Los gobiernos ricos y liberales de EAU, brindando beneficios sociales a sus ciudadanos, y ante la ausencia de conflictos políticos, hicieron de los emiratos, libres de impuestos, un paraíso durante años, atrayendo a 1,6 millones de trabajadores extranjeros.
El paisaje predominantemente desértico de la federación presenta ahora ciudades modernas que se han convertido en centro de los negocios mundiales.
Los ingresos del petróleo incrementaron su producto interno bruto (PIB) casi cuatro veces, a unos 41.000 millones de dólares en las últimas dos décadas.
Cientos de políticos y autoridades de gobierno de todo el mundo fueron invitados a un desfile de dos horas realizado el lunes. Espectáculos con luces láser, fuegos artificiales y atracciones culturales fueron presentados a miles de visitantes llegados para las celebraciones.
Las ceremonias fueron televisadas por redes de canales oficiales.
Todo esto, no obstante, no oculta las preocupaciones planteadas por la inseguridad de los precios del petróleo.
Al igual que otros estados productores de petróleo del mundo árabe, EAU intenta reducir su vulnerabilidad ante los caprichos del mercado mundial de petróleo, y en los últimos años ha intentado ampliar la base de su economía.
La mayor parte de la producción de petróleo de EAU, de unos 2,16 millones de barriles diarios, la cual aseguró a sus casi dos millones de ciudadanos una vida sin privaciones inimaginable hace 30 años, proviene de Abu Dhabi.
Además de Abu Dhabi, el mayor, más rico e influyente de los siete emiratos, EAU incluye el centro comercial del Golfo, Dubai, y los más pequeños emiratos de Sharjah, Aman, Umm al-Qaiwain, Ras al-Khaimah y Fujairah, los cuales dependen de fondos federales.
Dubai presentó recientemente un plan económico para la vida después del petróleo, que se agotará después del 2010.
Sus planes de promoción de industrias de alta tecnología se apoyan en capitales privados, la mejora de la productividad, la producción de capital intensivo y la atracción de las inversiones. Además, intenta transformarse en importante destino turístico. (FIN/IPS/tra-en/am/mu/lp/ip/96
