Italia expresó hoy su satisfacción por el retiro del Ejército de Iraq de la ciudad kurda de Arbil, contra la cual había iniciado una ofesnvia el sábado último.
Roma está "evaluando" declaraciones de autoridades iraquíes según las cuales Bagdad descartaría la posibilidad de restablecer su dominio militar sobre las provincias kurdas, señala un comunicado de la cancillería divulgado este lunes.
Arbil se encuentra al norte de Iraq, más allá del paralelo 36, en una zona que en 1991 el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas declaró área protegida luego de que Bagdad la atacara para sofocar una rebelión kurda durante la guerra del Golfo.
Las tropas que obedecen al gobierno del presidente Saddam Hussein invadieron la ciudad el sábado y comenzaron a retirarse en la noche de este domingo.
De acuerdo a informaciones difundidas este lunes por la cancillería, el jefe del gobierno italiano, Romano Prodi, visitará este martes Ankara, una actividad programada hace largo tiempo pero que adquiere gran importancia en virtud de la crisis en el Kurdistán iraquí.
Los 25 millones de kurdos se reparten sobre todo entre Turquía, Iraq e Irán y en menores proporciones en Siria y repúblicas ex soviéticas.
Ankara teme un nuevo flujo de refugiados kurdos hacia territorio turco, como ya ocurriera en 1991, cuando dos millones de kurdos llegaron al país huyendo de la represión de las tropas de Saddam Hussein.
Los turcos no ven con buenos ojos la consolidación de una entidad kurda en Iraq septentrional por el poder de atracción que podría ejercer sobre los separatistas kurdos locales.
Prodi será el primer jefe de un gobierno occidental que se encontrará con Ecmettin Erbakan, el nuevo primer ministro turco, líder de los fundamentalistas islámicos del Partido del Bienestar.
Bajo la conducción de Erkaban, Ankara se ha acercado al régimen islamista de Irán, pero sigue siendo miembro de la Organizacion del Tratado Atlantico Norte y su gobierno firmó un segundo acuerdo militar con Israel. (FIN/IPS/jp/dg/ip/96
