El primer ministro de Portugal, Antonio Guterres, ratificó hoy en Brasilia la prioridad de su gobierno a las relaciones con Brasil y firmó un acuerdo eliminando las visas en viajes cortos entre los dos países.
Con el acuerdo, científicos, empresarios, periodistas, profesionales y turistas brasileños y portugueses no necesitarán visas para visitas de hasta 90 días al otro país. Este período puede ser prorrogado por otros tres meses.
El objetivo es evitar los problemas diplomáticos que se repitieron en los últimos años, principalmente con ciudadanos brasileños.
El año pasado, cinco profesores portugueses se vieron impedidos de participar en un seminario en Brasil, al cual estaban invitados, por falta de visa. El hecho agravó los roces bilaterales, provocados principalmente por la numerosa emigración de odontólogos brasileños, no reconocidos en Portugal.
Guterres declaró, en el primer día de su visita de una semana, que su país tiene gran interés "en fortalecer el intercambio con Brasil y el Mercosur (Mercado Común del Sur)", destacando la prioridad brasileña por "cuestiones históricas y culturales".
Destacó como proyecto importante en las relaciones bilaterales, el cable submarino de fibra óptica con que las empresas de los dos países, Portugal Telecom y Telebras, podran ofrecer una comunicación más fluída y confiable entre los dos continentes, y también con Africa.
Empresarios portugueses tienen también interés en participar en la distribución de energía en Brasil, área que el gobierno brasileño empieza a privatizar.
Guterres llegó a Brasilia acompañado de cerca de 50 grandes empresarios portugueses. La intención es ampliar el comercio y las inversiones recíprocas, que crecieron mucho en los últimos años, pero se mantienen en niveles muy bajos.
El año pasado, el comercio bilateral alcanzó sólo a 650 millones de dólares, con un saldo favorable a Brasil de 242 millones. (FIN/IPS/mo/ag/ip/96)
