ARGENTINA: Nuevas revelaciones sobre destino de monjas francesas

Un fotógrafo argentino reveló hoy que los cuerpos de dos monjas francesas desaparecidas en este país en 1977 podrían haber sido enterrados junto a otros cadáveres en un cementerio de la provincia de Buenos Aires, luego de ser arrojados al Delta del Tigre.

El testimonio del fotógrafo Roberto Caguel, que trabajó para la policía de la provincia en los años de la dictadura militar (1976- 83), fue presentado este sábado en una radioemisora de Buenos Aires, a dos días de la visita oficial del presidente Carlos Menen a Francia.

Las revelaciones de Caguel siguieron a las del capitán de corbeta Adolfo Scilingo, quien este viernes dijo que entre los prisioneros detenidos que fueron arrojados al mar durante la represión ilegal estaban los de las religiosas Leonie Duquet y Alice Domon, de cuyo secuestro se acusa al capitán Alfredo Astiz.

Scilingo, que conmocionó al país en marzo al revelar que numerosos prisioneros habían sido lanzados vivos al mar, denunció este viernes que el 27 de diciembre envió una carta a Menem advirtiéndole sobre el destino final de las monjas.

En la misiva sugiere al mandatario que el jefe de la Armada pida colaboración a Astiz -beneficiado por la ley de Obediencia Debida que lo exoneró de proceso- para satisfacer el derecho de los familiares a conocer la verdad y hacer el correspondiente duelo.

Al no tener respuesta presidencial, Scilingo presentó una denuncia penal contra Menem por violación a los deberes de funcionario público, y reiteró que las monjas "murieron al ser arrojadas anestesiadas en aguas del Delta de Tigre".

Caguel sumó su testimonio este sábado al relatar que la policía lo contrató para fotografiar los cadáveres de más de 200 personas que aparecieron a orillas del Delta de Tigre, a la altura de la localidad bonaerense de San Fernando, unos 30 kilometros al norte de la capital.

Luego los cuerpos ingresaban al cementerio de San Fernando para ser sepultados sin identificación. Caguel dijo que al conocer las declaraciones de Scilingo sobre la posibilidad de que los cuerpos de las monjas hayan sido arrojados al Delta lo asoció inmediatamente con su labor.

"Los cuerpos eran arrastrados hasta la costa por la corriente y estaban irreconocibles, solo se podía ver si eran hombres o mujeres. Aparecieron también unos 10 tambores con cemento en los que iban los cuerpos, pero algunos estallaron en el agua y los cadaveres salieron", recordó.

El abogado de los familiares de las monjas, Horacio Méndez, consideró que los relatos de Scilingo y de Caguel "tienen credibilidad" y que "el tiempo transcurrido no invalida los testimonios" si sirven para satisfacer el derecho de la familia a conocer la verdad.

"Sabíamos que las monjas permanecieron detenidas unos 10 días en la Escuela de Mecánica de la Armada, sabíamos que prisioneros de ese centro clandestino fueron arrojados al mar, y también teníamos ya testimonios de que las religiosas fueron llevadas al Delta en un barco de la Prefectura Naval", dijo el letrado.

En cambio, consideró una novedad la alternativa de que Domon y Duquet pudieran haber sido arrojadas en tambores de cemento, y menos aún que sus cuerpos hubiesen aparecido luego en la costa arrastrados por la corriente y hubiesen sido enterrados.

Por su parte, la subsecretaria de derechos humanos, Alicia Pierini, consideró que las revelaciones de Scilingo y el testimonio del fotógrafo "tienen intencionalidad política" porque se presentan 20 años después de los hechos y en vísperas del viaje del presidente a París.

El caso Astiz, quien fue condenado a cadena perpetua en ausencia en Francia y tiene pedido de captura internacional, es el tema más delicado de la agenda bilateral y casi frustra la posibilidad de concretar la visita presidencial, ya que el marino, que pidió el retiro, aún sigue en carrera.

"Me parece tremendamente perverso que se use un tema tan doloroso y delicado como es el de los desaparecidos para atacar un viaje presidencial", dijo Pierini, y se preguntó por qué el fotógrafo y Scilingo no hablaron antes.

En respuesta, Caguel aseguro que sus fotografías fueron publicadas por los diarios en los años de la dictadura, y que no había considerado hasta hoy la necesidad de presentar su testimonio ante los medios nuevamente. (FIN/IPS/mv/jc/hd/96)

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe