La construcción de sistemas alimentarios inclusivos y más saludables y la protección de la salud del planeta serán algunas de las prioridades clave en la primera cumbre sobre el crucial tema, que se realizará el año próximo.
Las Naciones Unidas se están preparando para esta cita cimera, que será encabezada por la enviada especial del secretario general de las Naciones Unidas para la Cumbre sobre Sistemas Alimentarios 2021, Agnes Kalibata.
«La comida es más que lo que satisface nuestro hambre, es más que lo que nutre nuestro cuerpo y cerebro», dijo Kalibata, exministra de Agricultura y Recursos Animales de Ruanda (2008-2014), en un apasionado discurso en febrero cuando asumió esa función. «La comida es… economía, política», completó.
“Creemos en un mundo en el que sistemas alimentarios saludables, sostenibles e inclusivos permitan a las personas y al planeta prosperar. Un mundo sin pobreza ni hambre, un mundo de crecimiento inclusivo, sostenibilidad ambiental y justicia social, un mundo resiliente en el que nadie se quede atrás”, explicó Kalibata entonces a modo de declaración de intenciones.[pullquote]3[/pullquote]
La cumbre no tiene aún fecha concretada aunque ya comenzaron los procesos de conferencias regionales preparatorias para ello, coordinadas por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), aunque el cronograma ha tenido que ser modificada por la pandemia de la covid-19.
En una entrevista este mes con Noticias ONU, Kalibata dijo que el hecho de haber nacido en un campo de refugiados en Uganda moldeó su visión sobre la sostenibilidad alimentaria de muchas maneras.
Su familia recibió tierras de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), que utilizaron para comenzar una pequeña explotación agrícola familiar. Esa experiencia le permitió percibir las diferentes formas en que el sector agrícola tiene el potencial de «brindar enormes oportunidades a las comunidades de pequeños agricultores».
Pero los sistemas están en peligro debido a que el cambio climático «interfiere masivamente» con los sistemas alimentarios de todo el mundo, lo que provoca sequías, inundaciones e incendios, dijo.
«Los sistemas alimentarios de hoy no responden a lo que necesitamos como personas», agregó en su entrevista Noticias ONU. «La causa de muerte de una de cada tres personas en todo el mundo está relacionada con lo que comen», añadió.
Kalibata tiene planes ambiciosos para la Cumbre de sistemas alimentarios. Dijo que hay un Grupo de Trabajo de la ONU dedicado a la cumbre que guiará la investigación existente «para que nada se pierda», y que colaborará con expertos que examinan datos científicos de todo el mundo.
Sin embargo, su liderazgo se ha encontrado con la resistencia de unas 400 organizaciones de la sociedad civil vinculadas a los sistemas agrarios de las diferentes regiones del mundo.
La razón es que desdee 2014, Kalibata es la presidenta de la Alianza para una Revolución Verde en África (AGRA, en inglés), un proyecto de la Fundación de Bill y Melinda Gates que tiene como objetivo abordar la inseguridad alimentaria como un medio para afrontar la pobreza en África.
Desde que en febrero se anunció el liderazgo de Kalibata en la Cumbre de Sistemas Alimentarios de 2021, ha estado circulando una solicitud para su remoción del encargo como enviada especial.
“Dada la historia de AGRA, la designación de su presidenta para liderar, preparar y diseñar la Cumbre, resultará en otro foro que promueve los intereses de la agroindustria a costa de los agricultores y nuestro planeta”, se lee en la solicitud.
También se afirma que el interés central de AGRA sigue siendo saciar los intereses corporativos y canalizar los recursos públicos en esa dirección.
«Su modelo agrícola intensivo en finanzas y con altos insumos no es sostenible más allá de los subsidios constantes, que se obtienen de recursos públicos cada vez más escasos», se lee en la petición.
Se agrega que existe un gran desequilibrio en la dinámica de poder entre los agricultores y los comerciantes multinacionales de granos entre otros, que se benefician de la operación, mientras que los agricultores «permanecen atrapados en ciclos de pobreza y deuda».
Queda por ver cómo esta campaña afectará a su liderazgo, dado que los esfuerzos por el cambio climático y la sostenibilidad se están distanciando cada vez más de las grandes corporaciones y de quienes se alinean con ellas.
Mientras tanto, Yemen, que ha sido asolado por una hambruna durante casi cinco años, vuelve a tener una necesidad crítica ya que las lluvias torrenciales y las inundaciones han creado una necesidad urgente de medidas alimentarias y de seguridad.
Un portavoz del secretario general de la ONU, António Guterres, anunció que el organismo y sus socios han distribuido alimentos de emergencia y adoptado otras medidas para atenuar esta crisis humanitaria. Yemen sigue siendo uno de los países con mayor inseguridad alimentaria en el mundo, ocupando el puesto 111 del ranking de 113 países.
Para la primera Cumbre sobre Sistemas Alimentarios, indicó, también sería crucial estar atentos a cómo abordará las preocupaciones del país por la hambruna y la inseguridad alimentaria.
