El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, destacó la importancia de los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) en una reunión de alto nivel celebrada en el foro mundial.
El martes 29 Ban habló en el Evento de Alto Nivel del Grupo Central LGTB de la ONU sobre su experiencia con distintos gobiernos para eliminar las políticas que discriminan a la diversidad sexual.[pullquote]3[/pullquote]
«A veces tengo éxito y otras veces no, pero voy a seguir luchando hasta que todas las personas LGBT pueden vivir libremente sin sufrir intimidación o discriminación», declaró.
El tema políticamente delicado también surgió durante el segmento de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, cuando el presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, subrayó la necesidad de respetar y defender los derechos humanos, al tiempo que rechazó los derechos de las personas LGBTI.
“Rechazamos los intentos de prescribir ‘nuevos derechos’ que son contrarios a nuestros valores, normas, tradiciones y creencias», expresó Mugabe, en el 70 período de sesiones de la Asamblea General.
«Nosotros no somos gays», continuó el presidente del país del sur de África.
La declaración fue recibida con risas y pocos aplausos durante la sesión de la Asamblea General, cuyo tema es «Naciones Unidas a los 70 años: El camino por delante para la paz, la seguridad y los derechos humanos”.
El rechazo de Mugabe a los derechos de la población LGBTI es coherente con las políticas de su país.
La ley de Zimbabue estipula que toda persona culpable de realizar actos homosexuales recibirá una pena de cárcel o una multa. Asimismo, desde 2006 es un delito que dos personas del mismo sexo se tomen de la mano, se abracen o se besen en público.
Mugabe ha hablado abiertamente sobre la postura homofóbica de su gobierno, y durante una manifestación el 23 de julio de 2013 dijo que las personas LGBTI son «peores que cerdos, cabras y aves».
El gobierno de Arabia Saudita también rechazó todas las referencias a la homosexualidad durante la adopción de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), celebrada en una cumbre de la ONU del 25 al 27 de este mes.
«La mención del sexo en el texto, para nosotros, significa exactamente masculino y femenino. La mención de la familia significa que consiste en un hombre y una mujer casados”, declaró en la ocasión el ministro de Relaciones Exteriores saudí, Adel Al Jubeir.
Reservas similares con respecto a los derechos de la diversidad sexual fueron expresadas por varios Estados miembros durante la adopción de los ODS.
Por ejemplo, en el informe del Grupo de Trabajo Abierto sobre los ODS, Camerún rechazó toda política o informes relacionados con el objetivo 5.6, que «incluirá o tiende a incluir, expresa o implícitamente, los conceptos de orientación sexual, identidad de género, parejas del mismo sexo”, señaló.
La meta 5.6 señala la necesidad de garantizar el acceso universal a los servicios de salud sexual y reproductiva, incluida la planificación familiar.
Como resultado, la asesora especial sobre Planificación para el Desarrollo Posterior a 2015, Amina Mohammed, declaró públicamente en 2014 que los derechos de los homosexuales quedaban «fuera de la mesa» de negociaciones del programa de los ODS.
Actualmente, los ODS no hacen mención alguna de la orientación sexual ni de los derechos de las personas LGBT.[related_articles]
Sin embargo, un comunicado conjunto, publicado el martes 29 por 12 entidades de la ONU, entre ellas el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la Organización Mundial de la Salud y la Organización Internacional del Trabajo, reclamó a los Estados que cesen la violencia y la discriminación contra las personas LGBTI.
«El derecho internacional de los derechos humanos establece las obligaciones legales de los Estados para garantizar que toda persona, sin distinción, goce de estos derechos», recuerda el comunicado.
Las 12 agencias de la ONU instan específicamente a los gobiernos que deroguen las leyes discriminatorias, fortalezcan los esfuerzos por prevenir, vigilar y denunciar la violencia contra las personas LGBTI, y garanticen la inclusión de la diversidad sexual en el desarrollo.
«El no respetar los derechos humanos de las personas LGBTI ni protegerlos… constituyen graves violaciones del derecho internacional de los derechos humanos y tienen un impacto de largo alcance en la sociedad… y para el progreso hacia el logro de los futuros ODS», advirtieron.
Las leyes contra la homosexualidad en Zimbabue, por ejemplo, han sido un obstáculo para cumplir el octavo Objetivo de Desarrollo del Milenio, relacionado con la erradicación del VIH/sida.
Según el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/Sida, Zimbabue tiene una de las tasas de VIH más elevadas del mundo, ya que 15 por ciento de sus habitantes son seropositivos.
Traducido por Álvaro Queiruga