Un jugador de fútbol patea una pelota y anota un gol en un video que se proyecta antes de cada partido en la Copa Africana de Naciones, que se está jugando en Guinea Ecuatorial.
El video forma parte de la campaña “Fútbol africano contra el hambre”, una iniciativa conjunta de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Confederación Africana de Fútbol (CAF), y el gol simboliza la erradicación de este flagelo en el continente para 2025.
«El fútbol, como ningún otro deporte, une a la gente, dentro de los países y más allá de las fronteras. Es exactamente este tipo de unión que necesitamos para alcanzar la meta del hambre cero en África», declaró Mario Lubetkin, el director de comunicaciones de la FAO, en una entrevista en línea.
«Nuestro objetivo es aprovechar la popularidad del fútbol para dar a conocer la actual lucha contra el hambre en el continente y conseguir apoyo para las iniciativas locales que aprovechen los éxitos económicos africanos, con el objetivo de financiar proyectos que ayuden a las comunidades en las zonas que padecen la inseguridad alimentaria y generen medios de vida resilientes», explicó.
En 2014, los gobiernos africanos se comprometieron a erradicar el hambre crónica de sus poblaciones para 2025, en línea con la campaña Hambre cero de la Organización de las Naciones Unidas.
El hambre en África es un fenómeno generalizado, padecido por unos 227 millones de personas en todo el continente en 2014. Según el informe El estado de la inseguridad alimentaria en el mundo, lanzado por la FAO en octubre, 25 por ciento de la población subsahariana está desnutrida.[pullquote]3[/pullquote]
Y a pesar de sus extensas tierras fértiles y su gran población joven, África sigue gastando más de 40.000 millones de dólares por año en la importación de alimentos, indicó Tumusiime Rhoda Peace, comisaria de Economía y Agricultura Rural de la Comisión de la Unión Africana.
«El hecho de que la población del continente esté creciendo significa que mientras que África avanzó en la erradicación del hambre en la última década, el número total de personas que padecen hambre… aumentó. Esto le suma urgencia a la necesidad de financiar las soluciones locales que les permitan a las familias y comunidades fortalecer la seguridad alimentaria y generar medios de vida resilientes», señaló Lubetkin a IPS.
Apuntando a un vínculo más directo entre el fútbol y la lucha contra el hambre, el funcionario de la FAO dijo que una nutrición suficiente es tan esencial para el desarrollo cognitivo y físico como para alcanzar las metas personales. Ninguno de los jugadores de la copa africana podría desempeñarse con el nivel que lo hacen sin nutrirse de la manera adecuada, añadió.
«El potencial humano que se pierde por la persistencia del hambre sigue siendo inmenso. Nos conviene a todos sumar fuerzas para que el hambre quede en el pasado. La lucha contra el hambre es un deporte de equipo y todos tenemos que participar», exhortó.
Se calcula que más de 650 millones de personas mirarán por televisión la Copa Africana de Naciones, en la que equipos de Argelia, Burkina Faso, Cabo Verde, Camerún, Congo, República Democrática del Congo, Costa de Marfil, Gabón, Ghana, Guinea, Guinea Ecuatorial, Malí, Senegal, Sudáfrica, Túnez y Zambia competirán del 17 de enero al 8 de febrero por el trofeo de la victoria.
Los responsables de la campaña “Fútbol africano contra el hambre” esperan que, con el enorme número de gente que estará expuesta a la misma durante la copa, más personas se comprometan en la lucha contra el hambre.
«La historia demuestra que cuando la ciudadanía se compromete los gobiernos sienten el estímulo para dedicar fondos a la erradicación del hambre», aseguró Lubetkin.
«La participación ciudadana también suele conducir a que las comunidades se reúnan para encontrar soluciones innovadoras a problemas en común”, añadió.[related_articles]
Lubetkin explicó que los partidos de fútbol también se emplean para difundir el mensaje sobre el trabajo del Fondo Fiduciario Solidario para la Seguridad Alimentaria de África, creado por los líderes africanos en 2013 para alentar la participación de los países en el fondo como donantes, socios del proyecto y fuentes de conocimiento local.
«La labor en el terreno se realiza a través del Fondo, mediante proyectos que incrementan el empleo juvenil, mejoran la gestión de recursos y hagan que los medios de vida sean más resilientes y erradiquen el hambre mediante la generación de la producción sostenible de alimentos”, destacó.
Hasta ahora, el Fondo empleó 40 millones de dólares de los países africanos para empoderar a las comunidades de 30 países en la generación de empleos para jóvenes, ayudarles a utilizar de mejor manera sus recursos y mejorar su capacidad de recuperación en situaciones de crisis.
La FAO y el Fondo complementan el Programa Integral de Desarrollo de la Agricultura de África (CAAADP), una iniciativa a nivel continental para aumentar la productividad agrícola.
Lanzado por los gobiernos hace 10 años, el CAADP fue decisivo para que la agricultura volviera a ocupar un lugar prioritario en la discusión política, según Komla Bissi, asesor del programa en la Comisión de la Unión Africana.
«Nuestros gobiernos están volviendo a prometer recursos, y es el momento para que el sector privado se suba al carro», dijo a IPS. Añadió que 43 de los 54 países africanos firmaron el acuerdo del CAADP y 30 de ellos desarrollaron planes de inversión en el sector agrícola.
«La tarea de erradicar el hambre y lograr una producción sostenible de alimentos es un juego de largo aliento, y estos proyectos en curso, junto con otros futuros, son las semillas del progreso en la lucha contra el hambre», concluyó Lubetkin.
Edición de Phil Harris / Traducción de Álvaro Queiruga