El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió a la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) que monitoree el mercado global de alimentos para contrarrestar la especulación con productos agropecuarios y los bloqueos alimentarios.
Maduro recibió el domingo 16, en la sede de la FAO en Roma, un reconocimiento oficial de la organización por los logros del gobierno venezolano “al haber reducido a la mitad o más el número de personas desnutridas que se calculaba había en 1990/1992″. Otros 37 países fueron galardonados en la misma ceremonia.
En particular, la FAO elogia las políticas de distribución de alimentos puestas en práctica desde el primer gobierno de Hugo Chávez (1999-2013), fallecido en marzo, y considera su red de centros de distribución de alimentos subsidiados «la mejor del mundo».
Además, el país consiguió incrementar en 50 por ciento la ingesta diaria de calorías por persona y reducir la mortalidad por desnutrición entre niños menores de un año, de 117 por cada 100.000 nacidos vivos en 1997, a 18 por cada 100.000 en 2010.
Venezuela, un país petrolero, importa gran cantidad de alimentos y mantiene ociosas extensas tierras cultivables. En los últimos meses, se hizo notorio el desabastecimiento de productos esenciales en supermercados y tiendas.
En una entrevista con IPS TV apenas concluida la ceremonia, Maduro reconoció que «tenemos que consolidar, multiplicar y mejorar las políticas de acceso permanente al alimento».
IPS: Usted ha pedido a la FAO un monitoreo del mercado mundial de alimentos. ¿A qué se refiere exactamente?
NICOLÁS MADURO: Nosotros pedimos a la FAO que nos asesore para crear un sistema invulnerable de abastecimiento permanente de todos los productos alimenticios, que nos permita enfrentar tanto los ataques especulativos como los ataques de bloqueo económico que sufre Venezuela actualmente.
IPS: Su país es potencialmente autosuficiente en materia alimentaria. Pero una gran parte de la tierra cultivable no es trabajada. ¿Cómo puede la FAO ayudar a superar esa situación?
NM: Venezuela dispone de 30 millones de hectáreas de la mejor tierra cultivable, con excelentes condiciones de suelo y agua, pero que no está siendo aprovechada. Es que nosotros sufrimos la amputación del sector agrícola, provocada por la cultura petrolera desde hace 100 años. Lo que pedimos a la FAO es que nos asesore para hacer trabajar esa tierra incultivada hoy, con coordinación de todos los aspectos del proceso de producción agrícola y de distribución de alimentos.
IPS: La FAO reconoció al gobierno por haber logrado reducir el número de personas desnutridas que se calculaba había en 1990/1992 en más de la mitad. ¿Qué significa para usted?
NM: Hemos recibido el reconocimiento con gran orgullo, pero también con un sentido de compromiso, para continuar los esfuerzos en beneficio de toda la población venezolana. Tenemos que consolidar, multiplicar y mejorar las políticas de acceso permanente al alimento.
IPS: ¿Cuáles son esas políticas?
NM: La FAO estima que nuestra red de puntos de acceso a alimentos, que consiste en 23.000 centros de distribución, es la mejor del mundo. En estos centros atendemos a más de 17 millones de personas, más de 60 por ciento de la población. Además, nosotros subsidiamos 70 por ciento de los alimentos. Estas políticas benefician a las víctimas de las décadas del neoliberalismo en los años 1980 y 1990; son políticas para los pobres de nuestro país.
