Las regulaciones mexicanas para mejorar la calidad del aire no se cumplen o están desactualizados y eso afecta la salud humana, denunciaron cinco organizaciones no gubernamentales. Una disposición gubernamental obliga a la empresa estatal Petróleos Mexicanos a distribuir gasóleo de ultra bajo azufre desde febrero de 2009, pero esto no se ha materializado.
“Las actuales normas, que establecen los límites máximos permisibles de emisiones contaminantes, son equivalentes a las que Estados Unidos y Europa tenían hace seis años, lo que hace urgente por parte del gobierno su revisión”, dijo a Tierramérica la gerenta de Calidad del Aire y Cambio Climático del Centro de Transporte Sustentable, Hilda Martínez, una de las peticionarias.
Se necesita actualizar las regulaciones sobre la emisión de partículas suspendidas, dañinas para la salud, en vehículos ligeros y pesados y la creación de una norma de eficiencia vehicular, sostienen los ambientalistas.
