ARGENTINA-CHILE: Acuerdos y abrazos con sello femenino

Tras la firma de un importante Tratado de Integración y Cooperación, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, y su par de Argentina, Cristina Fernández, reeditaron este viernes el histórico abrazo de Maipú, protagonizado en 1818 por los generales libertadores Bernardo O'Higgins y José de San Martín.

Cristina Fernández y Michelle Bachelet Crédito: Presidencia de Argentina
Cristina Fernández y Michelle Bachelet Crédito: Presidencia de Argentina
"Con el abrazo que nos hemos dado, pero fundamentalmente con las cosas que hemos acordado, estamos protagonizando otro cruce de (la cordillera de) los Andes", ya no por libertad de los pueblos sino por el mejoramiento de las condiciones de vida de los habitantes de ambos países, señaló la presidenta argentina en una ceremonia realizada en la comuna de Maipú, al oeste de la capital chilena.

Fernández, que se encuentra de visita oficial en Chile desde el jueves, planteó que si el cruce de la cordillera en el siglo XIX fue para hacer una "guerra justa" por la independencia, si bien "la guerra siempre ha sido cosa de hombres", "es justo que la tarea de la igualdad y de la amistad esté a cargo de dos mujeres", dijo.

El 5 de abril de 1818 se llevó a cabo en los llanos de Maipú una decisiva batalla entre las fuerzas patriotas chilenas-argentinas, venidas desde la actual provincia argentina de Mendoza, y el ejército realista de España, que selló la independencia de Chile.

Al finalizar la gesta, O'Higgins, considerado el padre de la patria de Chile, y el prócer argentino San Martín, quien también participó de la emancipación de Perú, se dieron un fraternal abrazo, replicado 191 años después por Bachelet y Fernández.

La firma del Tratado de Integración y Cooperación da inicio a "una nueva etapa en nuestra relación bilateral, de construcción de confianzas, de caminar juntos en la construcción y consolidación democrática, de construir un futuro de integración regional, pero a la vez una voz latinoamericana en la globalización", declaró Bachelet.

El acuerdo incluye materias comerciales, proyectos de infraestructura y aspectos como la libre circulación de personas, entre otros.

Entre las iniciativas conjuntas que buscan dotar de mayor conectividad a los dos países, separados de sur a norte por la cordillera de los Andes, se destacan el Túnel de Baja Altura-Ferrocarril Trasandino Central y el Túnel Internacional Paso de Agua Negra.

"Tenemos hoy día problemas comunes, desafíos comunes y, claro, cada uno puede tener éxitos y logros, pero la tarea es lograr que el conjunto de la América del Sur logre tener mayor bienestar, mayor progreso para cada uno de sus habitantes", planteó la jefa de Estado chilena.

Bachelet aprovechó la ocasión para compartir "la tremenda alegría que tenemos de que finalmente se haya llegado a un acuerdo entre las partes en Honduras", en referencia al consenso logrado entre representantes del derrocado presidente Manuel Zelaya y del presidente de facto Roberto Micheletti para la restitución del primero.

Este año, Chile y Argentina conmemoran un cuarto de siglo de la firma, en 1984, del Tratado de Paz y Amistad que puso fin a un conflicto desatado por la soberanía del austral canal de Beagle. Ese acuerdo puso fin a una disputa que estuvo a punto de convertirse en guerra en 1978.

El 27 de noviembre Bachelet y Fernández realizarán una visita conjunta al Vaticano, donde se reunirán con el Papa Benedicto XVI para conmemorar aquel acuerdo que fue posible por la mediación del papa Juan Pablo II (1978-2005). La mandataria argentina anunció que llegarán en un mismo automóvil que portará las banderas de los dos países en señal de unidad.

El jueves, la presidenta argentina destacó el acuerdo tributario logrado este año por ambos gobiernos para dar curso al polémico proyecto minero binacional Pascua Lama, resistido en Chile por comunidades indígenas diaguitas, ecologistas y habitantes de la norteña región de Atacama, así como por habitantes y activistas de la noroccidental provincia argentina de San Juan.

El proyecto fue posible gracias al Tratado sobre Integración y Complementación Minera firmado por ambos países en 1995. "Los Estados no consolidan sus relaciones dependiendo del género de la persona que está en el poder en el país, pero esto sí puede significar un punto de inflexión respecto a hacer explícita esa voluntad y a la manera de poner el énfasis en determinado tipo de relaciones", comentó a IPS el politólogo Guillermo Holzmann.

"En este caso las dos presidentas han puesto el acento en la vinculación social de ambos países", que comparten cerca de 5.000 kilómetros de frontera, agregó el académico de la Universidad de Chile.

A su juicio, "Chile y Argentina han desarrollado caminos para poder superar las diferencias que datan desde 1978", destacándose la homologación de los gastos militares a través de una metodología encargada a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

Hace pocas semanas, el gobierno de Bachelet propuso a Perú replicar esta misma iniciativa, luego de que el presidente de ese país, Alan García, invitara a Chile a suscribir un "pacto de no agresión", por lo que considera una carrera armamentista de su vecino del sur.

Perú recurrió en 2008 a la Corte Internacional de Justicia, con sede en La Haya, por un reclamo marítimo que no es reconocido por Chile.

La presidenta Fernández abandonará Chile este viernes en la noche luego de inaugurar con Bachelet la XXIX Feria Internacional del Libro de Santiago, en la cual Argentina es el país invitado de honor.

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe