DESARROLLO: Brasil, India y Sudáfrica reafirman diálogo

Los cancilleres Celso Amorim, de Brasil, Shri S.M. Krishna, de India, y Maite Nkoana-Mashabane, de Sudáfrica, se comprometieron este martes en Brasilia a fortalecer un canal de diálogo tripartito para establecer posiciones comunes en asuntos globales y promover la cooperación Sur-Sur.

Los ministros de Relaciones Exteriores se reunieron en la capital de Brasil como parte de las actividades del Foro de Diálogo India-Brasil-Sudáfrica (IBSA), cuyos objetivos son intensificar la concertación política y evaluar el intercambio sectorial trilateral y la cooperación prestada a terceros países.

Establecido en 2003, el IBSA reúne a tres países en desarrollo de continentes distintos, con sociedades multiculturales, multiétnicas y democráticas, según destacan los gobiernos entre sus principios.

Pero además son tres potencias emergentes, que suman una población de casi 1.400 millones de personas y un producto interno bruto de más de 3,2 billones de dólares.

La declaración final del encuentro destaca que el canal de diálogo debe estrecharse para "ampliar la voz colectiva del Sur" y beneficiarse con mecanismos regionales de cooperación basados en experiencias y complementariedades comunes.
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La reunión ministerial, que se realiza anualmente rotando su sede entre los tres países, evaluó el avance de los proyectos de cooperación en agricultura, ciencia y tecnología, comercio, turismo, cultura y administración tributaria, entre otros.

Esa cooperación Sur-Sur es la primera después de los años 70 que comienza a dar frutos, como un verdadero diálogo, opinó Maria Regina Soares, profesora del Instituto Universitario de Investigación de Río de Janeiro.

En diálogo con IPS, Soares destacó, por ejemplo, la cooperación en el área de tecnología y las experiencias comunes en políticas sociales y de combate a la pobreza.

En seis años de funcionamiento, el IBSA intercambió experiencias sobre programas sociales. El plan Beca Familia, del gobierno brasileño de Luiz Inácio Lula da Silva es tomado como base de iniciativas similares en los otros dos países interlocutores en ese mecanismo.

Soares, coordinadora del Observatorio Político Sudamericano, considera no obstante que el punto débil hasta ahora es el de la seguridad regional, por tratarse, según la politóloga, de tres países con un "contexto regional geopolítico muy diferente".

El llamado Fondo IBSA, creado para financiar iniciativas de cooperación con países más pobres, ya impulsó proyectos en Haití, Guinea-Bissau y Cabo Verde, y están en marcha otros en Palestina, Burundi y Laos.

Los ministros discutieron posiciones con miras a la cuarta cumbre del IBSA, que tendrá lugar en Brasilia el 8 de octubre, y a la reunión del Grupo de los 20 (G-20) países industriales y emergentes con interés en el sistema financiero, que se celebrará en la ciudad estadounidense de Pittsburgh a fines de septiembre.

La declaración conjunta incluye un compromiso de reafirmar la concertación multilateral y de ampliar la participación de los países en desarrollo en las decisiones de los organismos internacionales multilaterales.

En ese aspecto reafirmaron la necesidad de una reforma democrática de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), "coherente con las prioridades de los países en desarrollo", por ejemplo ampliando la cantidad de miembros permanentes y no permanentes del Consejo de Seguridad del foro mundial de modo de asegurar una mayor participación de las naciones del Sur.

La declaración de Brasilia observa también que la crisis financiera internacional requiere una coordinación como socios entre los países desarrollados y en desarrollo, si bien aclara que "comenzó en el corazón de las economías desarrolladas".

Los ministros consideraron necesarias la regulación y supervisión de las actividades financieras internacionales y de sus instituciones, como el Fondo Monetario Internacional.

Soares señaló que la fuerza de este foro no se traduce necesariamente como peso o contrapeso mundial, sino en ámbitos determinados como el G-20 y la Organización Mundial del Comercio, donde India y Brasil, por ejemplo, "son más relevantes que Sudáfrica y tienen influencia".

La académica es autora junto a la argentina Mónica Hirst de un libro constituido por una colección de ensayos que discuten el papel de los tres países como potencias emergentes y su importancia creciente en los debates contemporáneos y de orden global.

En ese contexto, Soares subrayó la importancia de un foro que, después del proceso de democratización en Brasil, por primera vez refleja la idea de una política externa para los países del Sur del mundo.

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