Los peores lugares del mundo para que un extranjero busque amparo son el territorio palestino de Gaza, Sudáfrica y Tailandia, según el no gubernamental Comité para los Refugiados e Inmigrantes de Estados Unidos.
Este sector de la población mundial se redujo un poco en el último año, de 14 millones a 13,6 millones de personas, según un informe divulgado por Comité (conocido como Uscri, por sus siglas en inglés) en las vísperas del Día Mundial de los Refugiados, que se celebrará este sábado.
Casi 8,5 millones de personas se ven obligadas a residir en campamentos o se ven privadas de los derechos que les garantiza la Convención de las Naciones Unidas sobre el Estatus de los Refugiados de 1951 y su Protocolo de 1967.
Los palestinos son el mayor contingente de personas viviendo en esas condiciones: son más de 2,6 millones de personas que desde hace más de 60 años se ven obligadas a residir en otros puntos de Medio Oriente, según la última Encuesta Mundial de Refugiados del Uscri.
Gaza es el peor lugar del mundo para vivir desarraigado, añade, en especial tras la Operación Plomo Fundido, lanzada por Israel contra ese territorio palestino del 27 de diciembre al 19 de enero, que incluyó artillería pesada, bombardeos aéreos y varias incursiones de fuerzas terrestres.
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El ataque acabó con 1.400 vidas y dejó más de 5.000 heridos, buena parte de ellos civiles.
Las autoridades israelíes no permiten el ingreso de ayuda humanitaria en Gaza, y tampoco la reconstrucción ni la entrada de materiales para ese fin al territorio controlado por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás, por su acrónimo en árabe), considerado una organización terrorista por Estados Unidos y otros países occidentales.
Hamás controla Gaza desde junio de 2007, tras haber ganado las elecciones parlamentarias palestinas en enero del año anterior. En 2008, Israel dispuso un duro bloqueo económico y restringió el ingreso de productos de primera necesidad y de la gente que debía acudir a sus empleos en Israel.
La comunidad con mayor cantidad de refugiados el año pasado fueron los palestinos con 3.230 personas en los campamentos de Cisjordania y Gaza y otros de Medio Oriente, según el estudio de Uscri, divulgado al día siguiente del informe anual de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Hubo 15,2 millones de refugiados en 2008, un poco por debajo de los 16 millones del año anterior, además de 823.000 millones de solicitantes de asilo y de 26 millones de desplazados, según el estudio "Tendencias globales 2008", de Acnur.
Entre los últimos desplazamientos registrados, los que involucraron a más personas se registraron el año pasado en Pakistán, Sri Lanka y Somalia, donde la violencia desarraigó a cientos de miles de personas.
Entre ellas se cuentan los más de dos millones de civiles que debieron abandonar sus hogares en el valle de Swat, en Pakistán, donde fuerzas regulares y paramilitares realizaron operaciones contra movimiento extremista Talibán. Los afganos son la segunda comunidad con más refugiados. Casi tres millones de personas viven fuera de Afganistán, la mayoría en Pakistán e Irán, según Uscri.
El recrudecimiento de la violencia entre el Talibán y sus aliados, por un lado, y Estados Unidos, las fuerzas internacionales y el ejército de Afganistán, por otro, obligaron a los afganos a buscar refugio en el extranjero.
La campaña contrainsurgente de Islamabad en la frontera con Afganistán obligó a miles de pakistaníes a huir a esa nación vecina, aunque alrededor de 25.000 afganos regresaron a su país desde Pakistán el año pasado.
El tercer grupo lo constituyeron los iraquíes, cuyo país es el que expulsa a más personas desde hace más de tres años, según el informe de Uscri.
Casi dos millones de iraquíes viven en el extranjero, la mayoría en Siria, Jordania y Líbano. La disminución de episodios violentos registrada en los últimos dos años hizo decrecer de forma notoria el éxodo. Incluso algunas personas comenzaron a regresar a su país, indica el estudio.
Además, hay unos 800.000 birmanos fuera de su país, principalmente en Tailandia y Bangladesh.
Somalia, donde las permanentes luchas internas obligaron a escapar a unas 80.000 personas. Alrededor de 60.000 somalíes se refugiaron en Kenia y unos 20.000 en Yemen, además de los cientos de miles de desplazados internos en ese país del cuerno de África.
Los siguientes países con mayor cantidad de refugiados son Sudán, con 428.000, Colombia, con 400.000, y República Democrática del Congo, con 385.000, según Uscri.
Además de Gaza, Sudáfrica y Tailandia son los peores lugares para vivir como refugiado.
La violencia xenófoba invadió Sudáfrica en mayo de 2008. Una muchedumbre arrasó tugurios y asentamientos precarios con mayoría de extranjeros, llegando hasta incendiar algunos de ellos. Unas 10.000 personas buscaron refugio en Zambia.
Tailandia está en esa situación a raíz de sus planes para obligar a numerosos hmong a regresar a Laos y del trato dispensado a refugiados rohingya.
La marina de guerra tailandesa remolcó a mar abierto embarcaciones extremadamente precarias con 1.000 rohingyas, con poco alimento y bebida, para evitar que regresaran a la costa.
Otros países en esa misma situación son Kenia, por el trato dispensado a refugiados somalíes, Malasia, por la venta de deportados a organizaciones delictivas orquestada por funcionarios en la frontera con Tailandia, Egipto, por las condiciones en que vive la comunidad afgana, y Turquía, por repatriaciones forzosas, centros de detención hacinados y malos tratos contra detenidos.
En un sonado incidente, cuatro refugiados iraquíes se ahogaron tras ser obligados por funcionarios turcos a cruzar a nado un río fronterizo con Iraq.
En el otro extremo, Brasil, Ecuador y Costa Rica encabezan la lista de países donde los refugiados reciben mejores tratos, según el informe de Uscri.
El gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva permitió que palestinos obligados a escapar de Iraq permanecieran en territorio brasileño. Ecuador lanzó un programa para proteger y garantizar el derecho a trabajar y a viajar a decenas de miles de refugiados colombianos.
Numerosas naciones pobres reciben grandes contingentes de refugiados. Chad, siempre en la lista de los países menos adelantados de Naciones Unidas, alberga a unas 268.000 personas en esa situación. En Sudán residen 175.800 ciudadanos de Eritrea y Etiopía.
Naciones con un producto interno bruto (PIB) por persona menor a 2.000 dólares al año albergaron casi dos tercios de todos los refugiados.
El impacto de recibir población refugiada puede observarse comparando el PIB por habitante con la cantidad de personas en esa situación.
"Las 25 naciones con mayor proporción de refugiados por cada dólar del PIB por habitante son países en desarrollo, incluidos los 15 menos adelantados del mundo", según Acnur.
El informe calificó a Europa con la nota "D" y a Estados Unidos con la "F" por rechazar y deportar a solicitantes de asilo a lugares donde sus vidas corren peligro. También recibieron una "D" por su actuación en "detención y acceso a la justicia".
