La máxima autoridad electoral de Bolivia suspendió, alegando riesgo de violencia, los referendos por las autonomías departamentales, apoyados por la oposición, y por la reforma constitucional y el destino de los latifundios, alentados por el gobierno de Evo Morales.
Los promotores de la autonomía de los departamentos de Santa Cruz y Beni (este), Pando (norte) y Tarija (sur) rechazaron la medida, y advirtieron que la Corte Nacional Electoral (CNE) carece de la facultad de aplazar consultas ciudadanas.
El presidente de la CNE, José Luis Exeni, anunció la suspensión en la ciudad central de Cochabamba, tras una prolongada reunión con los responsables de los nueve organismos departamentales a cargo de controlar la celebración de comicios.
Exeni, además, solicitó al Congreso legislativo que realice las convocatorias para las tres consultas con un plazo mínimo de 90 días.
Los referendos se refieren a la reforma aprobada por la Asamblea Constituyente en diciembre, la extensión máxima de la propiedad particular de tierras y la autonomía de los departamentos. En este último caso, sus impulsores cumplieron con el requisito de presentar firmas de adhesión ante la CNE.
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La resolución del organismo advierte que los prefectos (gobernadores) de departamento no cuentan con la autoridad para convocar a referendo, ni las cortes electorales departamentales con la de administrar consultas ciudadanas sin respaldo del Congreso legislativo nacional.
Hasta principios de esta semana, las cortes electorales departamentales de las regiones controladas por la oposición amenazaban con organizar y fiscalizar los referendos al margen del las resoluciones de la CNE. Esta actitud auguraba una quiebra de esta institución.
La suspensión de los referendos fue rechazada de inmediato por el ex presidente Jorge Quiroga (2001-2002), líder de la agrupación derechista Poder Democrático y Social (Podemos).
Quiroga advirtió en la decisión de la CNE una estrategia política del gobierno y ejecutada por Exeni, periodista cercano al círculo de confianza del vicepresidente Álvaro García Linera.
Según el líder de Podemos, Exeni es un representante directo del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), lo que torna dudoso su desempeño en una institución que demanda imparcialidad en la conducción de procesos electorales.
La suspensión de los comicios llega en momentos en que ciudadanos de Santa Cruz, al este del país, acusan al gobierno central de eliminarlos indebidamente de los padrones electorales.
"Me han depurado, o sea que no existo para la Corte Nacional Electoral", declaró el viernes el cardenal Julio Terrazas, un religioso nacido en tierras cruceñas y con un permanente mensaje que combina la crítica al gobierno con llamados a la reconciliación entre los bolivianos.
El presidente de la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco), Rolando Aguilera, restó crédito a la decisión de la CNE y afirmó que el organismo carece del poder de suspender un proceso electoral, facultad, según él, sólo reservada al Tribunal Constitucional.
La CNE también reclamó al Congreso que cubra las vacantes en su integración y en las del Tribunal Constitucional, que no cuentan con la cantidad necesaria de miembros para considerar demandas de la ciudadanía.
Aguilera defendió el proceso autonomista cruceño y aseguró que, al haberse cumplido con los pasos legales, la región tiene vía libre para celebrar su referendo el 4 de mayo, el mismo día elegido por el gobierno para las consultas sobre la nueva constitución y la posesión de grandes extensiones de tierra.
En conferencia de prensa al cabo de la reunión con los representantes de las cortes electorales departamentales, Exeni llamó a garantizar el ejercicio pleno de la democracia y a "no abrir las puertas a la violencia".
El gobierno tiene el respaldo de una ley aprobada por el Congreso para llamar a referendo. Mientras, los departamentos de Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija resolvieron organizar y convocar otros para ratificar sus estatutos autonómicos, en franco desafío al gobierno del presidente Morales.
Otra ley, aprobada solo con los votos de la mayoría oficialista en el Congreso la semana pasada, restó valor a las convocatorias departamentales y reiteró que esa atribución sólo le corresponde al Poder Legislativo.
A pesar de esa advertencia, la propia Corte Electoral procura la realización de las consultas gubernamentales y de la oposición, al mismo tiempo.
Está en juego la democracia y aún se pueden lograr acuerdos, o, de lo contrario, asumir decisiones que pueden conducir al país a un enfrentamiento, dijo Exeni.
La semana pasada, tras la aprobación de la ley que autoriza el referendo constitucional y prohíbe a las regiones la convocatoria aislada a consultas populares, se quebró la frágil relación que mantenía el gobierno con los partidos de oposición.
El presidente del Senado, Oscar Ortiz, lanzó una campaña para solicitar a diplomáticos extranjeros que desconozcan el mandato constitucional del presidente Morales, quien, según él, vulneró las normas y procedimientos de aprobación de leyes.
Branco Marinkovic, presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz que congrega a empresarios, terratenientes y ciudadanos de clase media, desconoció el mandato democrático del presidente Morales.
Sin embargo, no logró influir en la opinión de los prefectos de oposición, que optaron por una posición de cautela.
