Un parque natural de 769 hectáreas enclavado en la costa norte de Cuba es una de las principales ofertas para turismo ecológico que promueve el país este año en Canadá y Europa. La reserva El Bagá, nombre de un pequeño árbol abundante en la zona, fue inaugurada a fines de diciembre pasado en Cayo Coco, unos 440 kilómetros al este de La Habana, y constituye una síntesis de los principales ecosistemas del archipiélago Sabana-Camagüey, un área con más de dos mil 500 pequeñas islas bajo protección estatal.
Entre sus atractivos figuran criaderos y exhibición de jutías conga (mamíferos roedores), flamencos rosados, cocodrilos, iguanas y otros animales, un mariposario, una plataforma para observación de aves acuáticas y una aldea aborigen.