Sasha y King, dos leones africanos (Panthera leo) rescatados de un circo por el Ministerio del Ambiente de Venezuela, serán alojados en el zoológico de Caricuao, al suroeste de la capital. «Sasha fue castrado y King sólo tiene garras en los miembros delanteros. Los tenían pasando maltratos en jaulas de dos por tres metros, cuando necesitan un mínimo de 50 metros cuadrados», dijo a Tierramérica Salvador Boher, director del zoológico.
Ambos animales tienen tres años y, tras una cuarentena en el hospital veterinario, pesan más de 100 kilogramos. Pero «cuando los trajimos eran casi cadáveres. Vieron carne y no sabían lo que era. En el circo sólo los alimentaban con patas de pollo», indicó.
Cuando los leones llegan a la adultez, a los cinco años, pueden pesar hasta 180 kilogramos.
Las autoridades ambientales no han determinado la procedencia de los felinos, y trabajan para establecer las sanciones que impondrán a los responsables del circo.