Decenas de plantaciones venezolanas de cacao (Theobroma cacao) y guanábana (Annona municata), y flores de cayena (Capsicum frutescens) en invernaderos, han sido afectados en las últimas semanas por la plaga Cochinilla rosada (Maconellicoccus hirsutus) en cuatro municipios del occidental estado de Mérida. La plaga, un insecto de tres milímetros traído a América desde Egipto a principios de los años 90, «succiona la savia de las plantas e inyecta una saliva tóxica que las seca por completo», dijo a Tierramérica Greys Centeno, experta del gubernamental Servicio Autónomo de Sanidad Agropecuaria.
«Las personas son en buena medida responsables de la propagación de la plaga cuando transportan plantas de un sitio a otro; y, si no se controla su ingreso al país, podríamos ver afectada nuestras exportaciones» agrícolas, explicó.
En Granada se reportaron pérdidas de más de tres millones de dólares de 1996 y 1997 debido a la Cochinilla rosada», apuntó Centeno.