Cineastas de Venezuela se sublevaron contra la decisión del gobierno de dar 17,7 millones de dólares al conocido actor y ahora director estadounidense Danny Glover para que ruede una película sobre el prócer haitiano Toussaint L'Ouverture.
"Con el mayor respeto, le decimos que usted se ha hecho parte de un hecho poco ético", manifestaron en una carta pública a Glover la Asociación Nacional de Autores Cinematográficos y la Cámara Venezolana de Productores de Largometrajes (Caveprol), que reúnen en conjunto a unos 380 realizadores.
"La cantidad de dinero que nuestro gobierno le acaba de asignar a su proyecto, de manera discrecional y secreta, corresponde al total de lo recibido por los organismos cinematográficos venezolanos en los últimos cinco años y serviría para financiar 36 películas venezolanas", expresó la carta de los cineastas.
La respuesta del gobierno no se hizo esperar. El ministro de Cultura, Francisco Sesto, declaró que ambas entidades "ya no serán reconocidas por el Ministerio ni por ninguno de sus entes adscriptos. Es una ruptura política: no las reconozco, he prescindido de ellas".
Según Sesto, los cineastas agrupados en esas entidades "no son representantes legítimos del universo cinematográfico. Se representan a sí mismos, son pequeños grupos con una visión monetarista, sólo les interesan los aspectos económicos".
Glover dijo al periódico cubano Juventud Rebelde que el filme "Toussaint" costará 30 millones de dólares. Productores estadounidenses aportarán el resto del dinero y el rodaje "ayudará al cine venezolano y a crear empleos", agregó.
Sesto, utilizando una metáfora típicamente estadounidense, indicó que Venezuela puede ingresar, gracias a esta coproducción, "en las Grandes Ligas del cine", en referencia a la máxima categoría del béisbol profesional en Estados Unidos.
El ministro agregó que este proyecto no afectará el financiamiento del cine local, pues el dinero para Glover surge de una asignación extraordinaria.
Glover, quien alcanzó notoriedad por su participación en películas como "Un poli con suerte", "El color púrpura" y la saga "Arma mortal", preside la organización no gubernamental estadounidense TransAfrica Forum, que promueve la igualdad de trato para África en la política exterior así como la prosperidad social y económica de los africanos y sus descendientes.
El actor es un decidido partidario del presidente de este país, Hugo Chávez y participa con frecuencia en conferencias y foros que organizan los seguidores del mandatario, es asesor de la cadena de televisión latinoamericana Telesur y ha asistido al programa de televisión del gobernante venezolano, Aló Presidente.
Este acceso directo a Chávez le facilitó a Glover la obtención del financiamiento para el film y concretar su anhelo de pasar de actor a director.
Thaelman Urgelles, presidente de Caveprol, dijo a IPS que hace dos meses Sesto y los gremios del cine organizaron un foro sobre la industria. "El ministro pudo tener la gentileza de siquiera informarnos, pero quizá ni él mismo lo sabía", señaló.
"No tenemos nada personal contra Glover y hasta me parece bien expandir nuestras relaciones con industrias del cine, pero la cantidad de dinero es desmedida, desconsidera el esfuerzo de los cineastas nacionales que no obtienen más de 450.000 dólares para un filme y sólo después de concursos y la obligación de buscar dinero propio".
Diego Rísquez, quien con un millón de dólares rodó el largometraje "Miranda", de gran éxito de crítica y público en 2006, dijo a IPS que la entrega de dinero a Glover "es un error, una falta de meditación, pone todos los huevos en una sola cesta".
"Cuando hacemos un largometraje, detrás del director hay un equipo de 70 personas, se genera un centenar de empleos directos y hasta 1.000 indirectos", comentó Rísquez.
"Aquí han venido cineastas españoles, franceses, italianos, además de Steven Spielberg para rodar parte de 'Aracnofobia'. La diferencia es que traían capital internacional para gastarlo en Venezuela", agregó.
Urgelles dijo que "la actitud del gobierno es inconsistente. Por una parte niega 46.000 dólares en concepto de derechos de autor a los herederos de Rómulo Gallegos por su novela 'Canaima' y por otra aparta casi dos millones para los derechos de 'El general en su laberinto' de Gabriel García Márquez".
El rodaje de "El general en su laberinto", la novela favorita de Chávez según su biógrafo Alberto Barrera Tyszka, es un proyecto de La Villa del Cine, un megaestudio cinematográfico inaugurado hace un año y que aún no produjo ninguna película.
Los cineastas también se plantean las razones que llevaron a escoger a L'Ouverture como tema del filme. "¿Por qué no alguno de nuestros héroes de ascendencia africana, que también los tenemos?", preguntó Rísquez. Urgelles comentó que "habría entendido más fácilmente que se optase por Petión, quien tanto ayudó a Simón Bolívar".
Alexandre Pétion (1770-1818), presidente haitiano desde 1806 hasta su muerte, auxilió a Bolívar en varias ocasiones con armas y pertrechos, y a los escolares venezolanos se les enseña que, por ello, el país tiene una "deuda histórica" con Haití.
Toussaint L'Ouverture (1746-1803) es, junto con Jean-Jacques Dessalines, uno de los líderes de la rebelión haitiana de finales del siglo XVIII, que combatió primero en defensa de la Revolución Francesa y luego contra las fuerzas españolas, británicas y napoleónicas.
L'Ouverture liberó no sólo a los esclavos del actual Haití, sino a los de toda la isla Hispaniola, que su país comparte con la República Dominicana, al conseguir la abolición de la esclavitud por la Asamblea Nacional francesa en 1794.
Más tarde debió combatir contra las fuerzas enviadas por Napoleón para restablecer la colonia y la esclavitud. Tras pactar un cese de hostilidades en 1802, fue traicionado, apresado y deportado a Francia, donde murió en 1803. La rebelión fue retomada por su lugarteniente Dessalines, un ex esclavo como él. Haití se declaró independiente el 1 de enero de 1804.
El presidente haitiano René Preval dijo al diario estadounidense The New York Daily News que "tuvimos la primera rebelión antiesclavista exitosa en este hemisferio. Es nuestra contribución a la humanidad. Si Glover la puede llevar a la gran pantalla, estaremos felices".
En cambio, Stanley Lucas, activista por los derechos de los inmigrantes haitianos en Estados Unidos, advirtió que la versión hollywoodense que prepara Glover "es un golpe de Estado contra la historia de Haití. Este filme no debería realizarse sin una gran participación de intelectuales, cineastas y artistas haitianos".
Glover indicó que Haití no formará parte de las locaciones donde se rodará la película con la que debutará como director, por razones de seguridad.
