Unos 100 mil árboles de especies nativas serán plantados hasta mediados de agosto en el marco de un programa de reforestación de la capital mexicana. Los árboles serán colocados en unas 100 hectáreas de zonas deforestadas y degradadas para mejorar su función de abastecedoras de los mantos acuíferos de los que se extrae gran parte del agua que consume la ciudad. «Además de reforestar, esta iniciativa genera educación ambiental, pues se realiza en su mayoría con voluntarios, de los que ya tenemos mil inscritos», dijo a Tierramérica Emiliano Robles, coordinador operativo de reforestación de la no gubernamental Naturalia. Según estudios de la Universidad Nacional Autónoma de México, en la capital viven unos nueve millones de personas y circulan más de 3,5 millones de vehículos, hay una progresiva deforestación y, entre los árboles que quedan, 15 por ciento son viejos y 30 por ciento están enfermos.