La ONU inició una campaña mundial de reclutamiento de soldados y adquisición de equipos e infraestructura militar para renovar su fuerza de paz en Líbano, a la que se asignó la misión de controlar el cese del fuego entre Israel y Hezbolá.
Cuando se le preguntó si al secretario general de la ONU, Kofi Annan, no le preocupaba que ningún país hubiera ofrecido aún tropas tras el cese del fuego dispuesto por el Consejo de Seguridad el viernes, Dujarric contestó: "Habrá una reunión más formal el jueves, y esperamos que entonces recibamos ofertas."
La resolución de cese del fuego, aprobada por la unanimidad de los 15 miembros del Consejo, incluyó el aumento del contingente de la Fuerza Interina de la ONU en Líbano (Unifil) de sus actuales 1.990 soldados a 10.000.
Como la Unifil ya está en el terreno, según Dujaric, la ONU no está operando "en el vacío".
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Desde el viernes, se realizaron en el marco de la ONU dos reuniones de países contribuyentes de tropas a misiones de paz. A la primera asistieron representantes de 28 naciones, y a la segunda, por los de 17.
Estados Unidos, que copatrocinó la resolución junto con Francia, ya anunció que no aportará soldados, pero sí apoyo logístico, incluido el transporte aéreo de tropas a Líbano.
Está previsto que el grueso de los uniformados procederán de países occidentales, con una participación pequeña o nula de países árabes. La ONU considera que sólo Occidente puede aportar una fuerza "robusta", es decir, bien entrenada y bien equipada.
El principal contingente será el francés, con unos 5.000 soldados, seguido por el italiano, con entre 2.000 y 3.000.
Otros aportes posibles son los de España y Australia, así como los de al menos tres países musulmanes, pero no árabes: Indonesia, Malasia y Turquía.
La Unifil, creada en marzo de 1958, funciona a un costo de 100 millones de dólares anuales. Si esta fuerza se renueva de acuerdo con las previsiones del Consejo de Seguridad, será la segunda misión de mantenimiento de la paz de la ONU por su magnitud.
Hoy, la mayor es la apostada en República Democrática del Congo (MONUC), creada en noviembre de 1999, que moviliza a 15.600 soldados a un costo de 1.100 millones de dólares anuales.
El comandante de la Unifil, el general francés Alain Pellegrini, se reunió con altos oficiales de los ejércitos libanés e israelí para "discutir la implementación y el cumplimiento del acuerdo" alcanzado en el Consejo, dijo Dujarric.
Los militares también consideraron la retirada del ejército israelí y el despliegue del libanés en el sur de Líbano, bastión de Hezbolá (Partido de Dios).
Dujarric dijo que tanto Annan como el Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz "están trabajando para reclutar soldados" para la Unifil.
"Necesitaremos una fuerza altamente capacitada, que pueda desarrollar el mandato del Consejo de Seguridad. Pero, pienso, al contrario de situaciones anteriores, que ya tenemos una fuerza en el sur de Líbano", explicó.
Por lo tanto, será un desafío llegar a la cantidad de uniformados necesarios, pero "no afrontaremos la situación con la que debimos lidiar en otros países, a los que fuimos sin que hubiera ninguna infraestructura de la ONU en el terreno", afirmó.
El Consejo de Seguridad aplaudió la decisión del gobierno libanés de desplegar 15.000 soldados en el sur del país, los que, sumados a los 15.000 que tendrá Unifil, llevarán el total de fuerzas de seguridad en el área a 30.000 militares.
La Unifil deberá coordinar sus actividades con los gobiernos de Líbano e Israel, de acuerdo con la resolución del Consejo, y apoyarán el despliegue de las tropas libanesas en el sur del país.
Al mismo tiempo, la fuerza de la ONU deberá asegurar el acceso de la población civil a la asistencia humanitaria y el retorno seguro de los desplazados a sus hogares.
El desarme de las milicias, entre ellas las de Hezbolá, no será responsabilidad de la Unifil. Pero la ONU "ayudará al gobierno de Líbano a ejercer su autoridad en toda la región meridional" del país.
Además de soldados, la ONU necesitará aviones, helicópteros, vehículos de transporte de tropas armadas y camiones. En general, las fuerzas occidentales que asisten a misiones de paz del foro mundial lo hacen con sus propios equipos.
