CHINA-VIETNAM: Frontera cerrada para los pollos

Guardias fronterizos de Vietnam restringieron la vigilancia para impedir el ingreso clandestino de pollos y huevos desde China, como parte de la campaña nacional contra la influenza aviar o ”gripe del pollo”.

Sin embargo, el contrabando continúa, para preocupación de las autoridades sanitarias, que temen por el éxito de un plan de vacunación de todas las aves de corral del país, ya iniciado en dos provincias.

”Cada día, confiscamos al menos una tonelada de pollos y miles de huevos”, declaró Hoang Minh Truong, director del Departamento de Control del Mercado de la septentrional provincia de Lang Son. Las aves y los huevos que ingresan de contrabando desde China son trasladados desde la provincia hacia ferias de todo el país.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre el comienzo de la epidemia en diciembre de 2003 y el 5 de este mes se registraron 112 casos humanos y 57 muertes por el virus de la influenza aviar. Cuarenta de los fallecimientos ocurrieron en Vietnam, 12 en Tailandia, cuatro en Camboya y uno en Indonesia.

En Vietnam, desde diciembre de 2004 hasta la fecha se registraron 63 infecciones y 20 muertes por el virus de la influenza aviar. De las tres personas infectadas entre el 14 de julio y 1 de agosto en este país de Asia sudoriental, dos fallecieron.

En un principio, se creía que la influenza aviar sólo afectaba a las aves, hasta que en 1997 se registraron los primeros casos humanos, contagiados por contacto con los animales infectados.

Las aves expulsan el virus a través de sus excrementos, que una vez secos y pulverizados, pueden ser inhalado por los humanos.

Los síntomas son similares a los de otras clases de influenza: fiebre, malestar, dolor de garganta y tos, y en algunos casos, conjuntivitis. Existen 15 cepas del virus, pero la única que infecta a humanos es la cepa H5N1, que a su vez presenta varios subtipos.

Expertos en salud advirtieron que, si alguna cepa desarrolla la capacidad de transmisión entre personas, se producirá una pandemia mundial.

Por ahora, las autoridades sanitarias vietnamitas decidieron reforzar la prevención entre los trabajadores de las granjas, incluso a través de la vacunación.

”La gripe aviar está extendida en el delta del río Rojo, en el norte, y en el delta del Mekong, en el sur”, explicó a IPS el director del centro de salud de la meridional provincia de Tien Giang, Nguyen Thi Viet Nga.

Tien Giang y la septentrional Nam Dinh fueron las primeras provincias en lanzar un programa de vacunación.

Pero la presencia en Hanoi y Ho Chi Minh de alimentos derivados de pollos, huevos y cerdos procedentes de países recientemente afectados por brotes de gripe del pollo genera gran preocupación en las autoridades, igual que la escasez de inspectores.

Más de 140 millones de aves de corral fueron sacrificadas en Tailandia, Indonesia, China y Vietnam en un esfuerzo por contener la enfermedad.

Expertos internacionales advirtieron que la enfermedad ya es endémica en China y Vietnam, donde la mayoría de las aves de corral son criadas en el ámbito doméstico, lo que dificulta el control. Los mataderos ilegales son otro problema que requiere atención urgente.

Bui Quang Anh, director del Departamento de Salud Animal del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, admitió que los gobiernos locales ”sólo sacrificaron 10 por ciento de un total de 10 millones de pollos, patos y gansos afectados”.

Sin embargo, aclaró que ”desde el estallido de la epidemia, Vietnam siempre informó de forma transparente a la OMS”.

Además de la vacunación de pollos y patos en Tien Gang y Nam Dinh, considerada una prueba para futuros planes nacionales de inmunización, las autoridades sanitarias desarrollaron un programa paralelo de educación pública que exhorta a la población a abstenerse de comer esos animales hasta 30 días después de vacunados.

Asimismo, los criadores de pollos deberán registrar sistemáticamente los síntomas de los animales en formularios especiales.

Mientras, en la capital, está en curso un ”mes de acción” para contener la epidemia. El riesgo de una propagación mayor de la enfermedad es alto porque, al igual que en el interior, muchos hogares crían aves y existen numerosos mataderos y puntos de venta ilegales.

Anton Rychener, representante principal de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) cree que la propagación de la enfermedad está contenida porque todavía es verano en el hemisferio norte.

”Debemos estar preparados para la estación fría, que comienza en octubre”, advirtió.

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