La Organización de las Naciones Unidas (ONU) y el gobierno de Siria negaron que toleren o alienten actividad terrorista en campamentos para refugiados palestinos, en respuesta a acusaciones de legisladores de Estados Unidos y del embajador del país ante el foro mundial.
El secretario general de la ONU, Kofi Annan, enfatizó en cartas divulgadas esta semana que el Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Cercano Oriente (UNRWA, por sus siglas en inglés) brinda servicio social y humanitario a esos campamentos, pero no se encarga de su seguridad.
El director del UNRWA, Peter Hansen, explicó por su parte que esa agencia no tiene el deber de informar sobre ningún tipo de actividad política en los campamentos, y que la responsabilidad de mantener el orden en ellos es de las autoridades palestinas e israelíes.
El senador Arlen Specter, del gobernante Partido Republicano, y el diputado Tom Lantes, del opositor Partido Demócrata, enviaron en mayo una carta a Annan en la cual acusaron al UNRWA de permitir y promover actividades terroristas en los campamentos.
Specter afirmó que los libros de texto usados en escuelas instaladas por la agencia promueven sentimientos antisemitas, y Lantos aseguró que el UNRWA permitía a terroristas organizar ataques contra israelíes.
Hansen respondió a Specter con una carta en la cual destacó que las actividades terroristas en el campamento de refugiados de (la septentrional ciudad cisjordana de) Jenín no fueron auspiciadas por el UNRWA.
Esa agencia está obligada a usar los libros de texto de los países en los que están sus escuelas, y además las autoridades educativas palestinas corrigieron hace dos años características antisemitas de los programas, explicó.
El UNRWA editó materiales educativos suplementarios que promueven la tolerancia, los derechos humanos y la búsqueda de soluciones pacíficas a los conflictos, añadió.
La ONU no tiene la responsabilidad de asuntos de seguridad en los campamentos para refugiados ni en ninguna otra parte de los territorios ocupados. Eso depende de las autoridades del lugar donde estén, sea Israel o la Autoridad Nacional Palestina (ANP), señaló Annan en una carta a Lantos fechada el 7 de este mes.
El embajador de Estados Unidos ante el Consejo de Seguridad de la ONU, John Negroponte, había acusado el jueves a Siria de apoyar operaciones terroristas palestinas en campamentos para refugiados.
El canciller y viceprimer ministro sirio, Farouk Al Sharam, respondió a las acusaciones de Negroponte el viernes en una conferencia de prensa, tras dirigir la reunión del Consejo de Seguridad, cuya presidencia rotativa ejerce en la actualidad su país.
Tenemos 400.000 refugiados palestinos en Siria. Esas personas tienen derecho a expresar sus opiniones políticas. Es un derecho básico de todas las organizaciones palestinas en Siria, pero éstas sólo tienen oficinas de prensa, y no bases de operaciones, aseguró.
Todas las operaciones palestnas son diseñadas, planificadas y ejecutadas en los territorios ocupados por Israel, aseveró.
Si Negroponte y el gobierno de Estados Unidos están preocupados, llamo a los 400.000 palestinos en Damasco y les digo que vuelvan a su hogar, a Palestina, añadió, en alusión al derecho al retorno de los refugiados, negado por Israel.
Tienen derecho a volver, de acuerdo con las resoluciones de la ONU, e Israel bloquea su regreso. El gobierno de Estados Unidos debería criticar a Israel por no permitir que esas personas vuelvan a su hogar, y no a los países que las albergan y satisfacen sus necesidades básicas, afirmó.
Annan había dicho ante el Consejo de Seguridad que la situación económica y social en los territorios ocupados es el mayor obstáculo para la paz.
Las condiciones de vida de los palestinos se deterioraron en los últimos 18 meses. Más de dos tercios de la población en Gaza vive debajo de la línea de pobreza, subrayó.
Annan instó a Israel a retirar sus tropas de los territorios palestinos, y a la ANP a que haga más para detener los ataques terroristas en Israel.
Sólo se logrará una solución duradera del conflicto si se pone fin a la ocupación y los asentamientos israelíes en territorio palestino. No habrá ni paz ni seguridad mientras la ocupación continúe, alegó.
Al Shara expresó pesimismo sobre el futuro de Medio Oriente. Damos lo mejor de nosotros para hallar una solución, pero si no se logra una con base en las resoluciones de la ONU, que ponga fin a la ocupación israelí, no habrá paz duradera, dijo a periodistas.
El primer ministro israelí, Ariel Sharon, toma el camino equivocado. Quiere lograr la seguridad primero y luego la paz. Eso nunca pasó en la historia. El camino que eligió está bloqueado y nunca tendrá éxito, advirtió.
El canciller sirio arguyó que todos los ingredientes necesarios para lograr la paz están en la propuesta de Arabia Saudita que hizo suya la Liga Arabe.
Esa iniciativa ofrece la normalización de relaciones de los países árabes con Israel, a cambio del retiro israelí de los territorios ocupados en 1967. (FIN/IPS/tra-eng/ts/aa/rp/mp/ip/02
