La industria azucarera de Perú logró duplicar su producción en apenas cinco años, pero sus esfuerzos se estrellan con la competencia de las importaciones subsidiadas procedentes de países vecinos.
La extensión sembrada de caña de azúcar aumentó 40 por ciento y la productividad por hectárea se elevó 20 por ciento, lo que insumió una inversión de más de 200 millones de dólares a las 10 principales empresas del sector.
Esos resultados han permitido reducir la importación de 500 toneladas en 1998 a 125 toneladas, lo cual significa que Perú se aproxima rápidamente al autoabastecimiento… si es que antes no colapsa el sector, sostuvo el editor de la revista Agronoticias, Reynaldo Trinidad.
Los avances no significaron un aumento de la rentabilidad, porque los precios internos están distorsionados por la importación a precios subsidiados en los países de origen, sostuvo Trinidad.
A pesar de su importancia social, pues proporciona empleo directo e indirecto a 150.000 trabajadores, el sector azucarero no está suficientemente protegido ante la competencia desleal de precios (dumping), agregó el experto.
Colombia, principal abastecedor externo de azúcar de Perú, y Venezuela son los dos países socios de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) acusados por la Asociación Peruana de Productores de Azúcar de subsidiar su producción.
Por otra parte, Colombia, Ecuador —el cuarto socio de la CAN— y Venezuela aplican cuotas de importacion y medidas de salvaguardia para proteger su sector agropecuario. Los productores azucareros de Perú piden al gobierno que ponga en práctica restricciones similares.
Los azucareros colombianos pagan al fisco, por todo concepto, un único impuesto de tres por ciento a las ventas. En cambio, los azucareros peruanos deben pagar, al igual que los otros sectores productivos, un impuesto de 18 por ciento a las ventas y otro de 30 por ciento a la renta.
Por eso, el sector azucarero de Perú, que producirá, según las previsiones, 901.000 toneladas este año, demanda que el sistema tributario que los rige se equipare a los del resto de la CAN.
El problema no es solo del azúcar, sino también del arroz y del maíz, que sufren el impacto de una política neoliberal que favorece la importación sin tomar en cuenta que la mayoría de los países exportadores de productos agrícolas subsidian sus ventas, dijo el economista Hugo Aquino.
Los productores azucareros demandan la reducción de aranceles para los bienes de capital y para los insumos agrarios, así como una rectificación del criterio vigente en el sistema de franja de precios para los productores agrícolas, afirmó Aquino.
Este sistema tiene el objetivo de estabilizar los precios en base a los de las bolsas internacionales, sin tomar en cuenta que en ellas se transan excedentes y con precios por debajo de los costos de producción, sostuvo el presidente de la Asociación Peruana de Productores de Azúcar, Carlos Andrade.
Este sistema fue adoptado supuestamente para proteger el interés del consumidor, pero en la práctica no lo beneficia en absoluto, advirtió Andrade.
Los precios pagados a los productores bajaron 18 por ciento en los últimos 10 meses, pero esa disminución no se ha trasladó a los precios minoristas internos. El sistema sólo beneficia a los vendedores mayoristas que son, justamente, los importadores, consideró el productor.
Andrade aseguró que los importadores presionan a la baja los precios internos comprando en exceso en relación con la demanda real.
El precio del azúcar blanca al consumidor se mantiene inalterable desde hace cuatro años, en el equivalente a 0,57 dólares al cambio actual. Sin embargo, el precio por bolsa de azúcar nacional bajó 4,14 dólares, una disminución del 18 por ciento, precisó.
De mantenerse esa situación, la agroindustria azucarera tendrá una pérdida anual de 50 millones de dólares, equivalentes, aproximadamente, a 15 por ciento de las ventas programadas para este año, se lamentó Andrade.
Los productores lograron en marzo que el gobierno elevara el arancel para la importación de azúcar de 12 a 20 por ciento. Pero los importadores se anticiparon y compraron antes del aumento sus existencias para todo el año.
El arancel actual es reducido en términos internacionales, pues la Organización Mundial de Comercio admite para países como Perú aranceles por encima de 100 por ciento.
Estados Unidos tiene un arancel de más de 400 por ciento, de modo que uno de 100 por ciento no es excesivo, dijo Andrade.
El productor también reclamó al gobierno el cumplimiento de su compromiso de que las empresas públicas y los programas de asistencia alimentaria del Estado sólo compren azúcar nacional. (FIN/IPS/al/mj/dv if/02
